Tendencias
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Agosto llega a su fin y el horizonte otoñal ya no se vislumbra tan lejano. Aunque aún quedan días de verano, la rentrée de septiembre se antoja de lo más apetecible gracias a las tendencias que llegarán con la nueva temporada.
Las temperaturas parece que nos dan una tregua y los primeros looks otoñales comienzan a dibujarse en nuestro imaginario fashionista. Pero este año, la neutralidad cromática característica de esta estación no se pinta (solo) de colores tierra.
Es cierto que la estética gótica, con el total black como protagonista, vivirá una nueva edad dorada los próximos meses, como adelantaron en sus propuestas de pasarela Rodarte o Moschino, pero esta vez el otoño nos dibuja una mujer hiperfemenina que adapta y adopta los tonos pastel tradicionalmente ligados a la primavera.
Y es que la pasarela habló hace meses para traer de vuelta tendencias revisadas: vuelve la elegante feminidad del New Look con nuevas versiones de la falda Corolle que Dior convirtió en icono de moda y las cinturas se marcan al extremo para dibujar con detalle el cuerpo de la mujer.
Eso sí, son los básicos atemporales, cada vez más importantes en nuestro armario, los que marcarán el ritmo del otoño. Y este año, la novedad es que se colorean de tonos pastel que invitan a renacer en este inicio de curso.
Azules, malvas y rosas adquieren matices empolvados de lo más seductores y evocan una calidez que invita a encontrar un refugio interior en el que la feminidad más seductora encuentra su lugar para soñar.
En un juego de contrastes de lo más inspirador, las gasas y las sedas más sutiles, los satenes seductores o las sofisticadas plumas, encuentran su complemento perfecto en la calidez del punto o, incluso, la pana.
El vestido es el rey, sí, pero no faltarán tampoco en nuestro armario de otoño blusas románticas, twinsets confortables, versátiles conjuntos de falda y chaqueta o, incluso, monos de inspiración retro que se convertirán en una segunda piel.
La producción de fotos que ilustra este artículo derrocha feminidad. Es la más sofisticada y romántica de la temporada, con fotografías de Sergi Pons y estilismo de Carla Aguilar. La modelo es Anna Vivchar, de Low Models; el maquillaje y la peluquería han corrido a cargo de Raquel Costales para Chanel y Redken. El asistente digital ha sido Adriá Botella, el asistente de luces Jordi Cortés y la asistente de estilismo, María Vidal.