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"Espectacular", "impresionante" o "más guapa que nunca" son algunos de los adjetivos que más se escucharon el pasado 1 de febrero en la premiére española de 'Zoolander No.2' para referirse a Penélope Cruz. Ella, con su media sonrisa, su larga melena suelta y un diseño blanco firmado por Versace, acaparó todos los flashes a su llegada a los cines Capitol de Madrid.
Un día después volvía a hacerlo. Esta vez era Berlín la ciudad en la que recalaba el tour promocional de la película y un minivestido verde de Balmain el que corroboraba que 'Pe', esa que lideraba las listas de las más elegantes, había vuelto para quedarse. ¿O es que nunca se fue?
Cierto es que llevaba unos años en los que no todos sus estilismos recibían un 10 por parte de la crítica, pero tampoco es casualidad que hace nueve años la publicación Entertainment Weekly la nombrara la actriz mejor vestida de la historia de los Oscar por el ya famoso diseño color maquillaje de Versace que lució con acierto en 2006.
Sea como fuere, sus últimas apariciones públicas, así como su participación en la secuela de la comedia creada por Ben Stiller (donde, por cierto, ejerce de perfecta ' sex symbol' más guapa que nunca) o su inclusión en Instagram han hecho que el nombre de Penélope Cruz recupere el trono del que, quizá, nunca debió bajar. Habrá que esperar a los próximos 6 y 28 de febrero (entrega de los Goya y Oscar, respectivamente) para comprobar si la de Alcobendas sigue desenvolviéndose por las alfombras rojas como pez en el agua.