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El próximo 28 de noviembre, Shanghai tendrá la suerte de ser la ciudad anfitriona del desfile anual de Victoria's Secret, probablemente el show de moda con más audiencia viral del globo. Existe una gran expectación por conocer cómo cristalizará la colaboración entre la marca lencera y Balmain pero, sin duda, uno de los platos fuertes de la noche será la quincuagésima colaboración entre Victoria's Secret y Swarovski: un millón de cristales de Swarovski se pasearán por el 'catwalk' repartidos en vario 'looks'.
La elegida para llevar el estilismo estrella será Elsa Hosk, ángel de Victoria's Secret desde 2015. Este llevará 275.000 cristales multicolores, casi 200 metros de cinta de raso y unas alas de casi siete kilos de peso. “Se trata de uno de los trajes más pesados que hemos hecho jamás”, ha explicado Monica Mitro, vicepresidenta ejecutiva de la firma. Además del extravagante tocado de ángel, el artesano modisto Serkan Cura ha diseñado un conjunto de sujetador y braguita a juego color rojo, embellecidos por mangas cuajadas de piedras bordadas y sandalias de plumas.
Pero no será este el único 'look' del desfile que tendrá el brillo como protagonista. Como cada año, una de las modelos más afortunadas presentará el 'Fantasy Bra' (el sujetador de fantasía), una joya en sí mismo. Será la brasileña Lais Ribeiro quien llevará una pieza cuajada de diamantes, zafiros amarillos y topacios azules, engastado en oro de 18 quilates y valorado en alrededor de unos dos millones de dólares (1,7 millones de euros). Ribeiro coge el testigo de Jasmine Tookes, que el año pasado desfiló en París con un sujetador de diamantes y brillantes valorado en tres millones de dólares.