Lovely Pepa lleva el bañador más superclase que hemos visto hasta ahora

Es el momento más temido en la piscina del hotel: la competición por destacar entre los bañadores y biquinis presentes. Lo cierto es que la sofisticación de esta prendas crece cada año, con diseños cada vez más complicados que añaden todo tipo de elementos decorativos, desde piedras hasta broches, aplicaciones o calados. Son prendas que exigen un alto desembolso para una duración en entredicho: inevitablemente, los rayos del sol y el desgaste del cloro y la sal hacen mella en los tejidos, con lo que es difícil que envejezcan bien. Por eso nos convence desde ya el bañador de Lovely Pepa .

Al final, la experiencia nos dice que la sencillez de adornos en un bañador es una oportunidad para economizar en una prenda que vamos a tener que reponer pronto y también una forma de minimizar el riesgo de que el uso lo estropee. En cuanto algun aplique se rompe o cae, la prenda queda inevitablemente mellada. En este bañador que ha elegido Lovely Pepa los adornos son inexistentes, todo se juega en el propio diseño cruzado y terminado en un lazo. Nos imaginamos a cualquier estrella del Hollywood dorado tomando el sol con él en cualquier piscina de hotel de lujo de Los Ángeles.

Se trata de un bañador de la firma Olyswimwear, que apuesta por una fantástica y muy favorecedora combinación de banco y negro. Va completamente forrado y con un 20% de lycra, con lo que podemos contar con un punto extra de sujección. El patrón cruzado marca la cintura y alarga el talle, con lo que ópticamente reduce la silueta. Por delante es súper elegante y sobrio, porque se deja la espectacularidad para la espalda, totalmente abierta y cruzada por un tirante blanco y otro negro. El precio entra dentro de la sensatez: 65 euros. La verdad: nos encanta.