moda
moda
Parece que cada vez resuena con más fuerza en nuestros armarios el eco de la sostenibilidad. Una corriente que nos invita a abogar por hacer elecciones estilísticas con una clara conciencia responsable con el medio ambiente. Conocida como Slow Fashion, el movimiento plantea entre otras cosas que es indispensable contribuir a comprar en marcas locales, entender lo que está detrás de cada colección; así como el proceso creativo del diseñador para diseñar cada prenda. Con estos pasos cumplidos es cuando se puede dejar de lado el comprar por comprar y el desapego a nuestras prendas, que nos lleva muchas veces a desecharlas sin pensar.
En nuestro radar empiezan a entrar firmas españolas que encajan en esta categoría y cuyas prendas nos han enamorado como hizo el chaleco de punto de Möhel o la marca de Sara Carbonero e Isabel Jiménez, que apuesta por esta desaceleración estética. Pero ha sido gracias a Paula Echevarría que hemos hecho el último descubrimiento que nos ha abierto los ojos a un nuevo universo de posibilidades.
Bajo el nombre de Maksu, esta joven firma que abrió sus puertas hace pocos meses en el centro de Madrid ( c/ Lagasca, 50) empezó a sernos familiar cuando Paula publicó una fotos suya con un precioso minivestido de bajo asimétrico, bordados en el pecho e inspiración boho. El modelo Jerónimos, que sigue a la venta en la web de la marca es solo una muestra del saber hacer de Maksu.
Según sus propias creadoras, Maksu nace para responder a los nuevos tiempos, a un mundo que cambia y que tiene que consumir menos, mejor y de manera más responsable. “Por ello el principal objetivo es aportar valor creando prendas de alta calidad a precios accesibles”, aseguran.
En sus colecciones buscan crear prendas elegantes que llamen la atención por sus detalles y su calidad. Y lo que es más llamativo: no creen en las temporadas. Esta declaración de intenciones que parece ir contra todo lo que hoy vemos en las tiendas de moda low cost, nace de la convicción de hacer ropa atemporal y única.
Tampoco diseñan para un tipo de mujer, sino para la mujer actual. “La moda va más allá de las tendencias: la selección de tejidos, la artesanía y los colores son la esencia de todos los diseños de Maksu. Las sedas, los tejidos italianos, los bordados, la pedrería y la confección son siempre los grandes protagonistas”, explican.
Desde sus delicados vestidos, elaborados con las sedas de mayor calidad, hasta los jerseys de punto con bordados, tan cálidos y confortables como originales, la exclusividad también es uno de sus valores más destacables. Y es que no producen masivamente ya que, por lo general, de cada modelo no superan las cincuenta unidades. Esto hace aún más especiales si cabe sus prendas, ya que puedes tener la certeza de que no las llevará todo el mundo.
El romanticismo y la feminidad sutil y sin complicaciones es lo que motiva a sus diseñadoras, que además trabajan desde su atelier instalado dentro de la misma tienda, lo que les aporta una cercanía aún mayor a su clientela, de la que siempre están atentas para conocer de primera mano sus impresiones y necesidades. Así las colecciones de Maksu están vivas, siempre cambiando, al margen de cualquier tendencia efímera y pasajera, pendientes nada más que de dar un valor añadido al armario femenino, que con el tiempo, lejos de quedarse obsoleto, ganará identidad y personalidad.