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Posiblemente tengas unos pantalones blancos en tu armario. Es decir, son un básico que todas compramos en algún momento de nuestra vida. Pero, seguro que no les das el uso que deberías. Y sabemos por qué: son muy difíciles de llevar. Muchos se transparentan y nos obligan a llevar ciertas prendas interiores. Otros ensanchan demasiado la figura. Y, el temor principal es que se manchan con solo mirarlos. Salir con un pantalón blanco significa estar sufriendo toda la jornada pensando en evitar a toda costa que cualquier cosa entre en contacto con él. Para, después del sinvivir y ese sentimiento de victoria, darnos cuenta al quitárnoslo de que, efectivamente, si nos lo hemos ensuciando. ¡Qué rabia!
Bueno, se acabó. Este tipo de pantalones, en cualquiera de sus versiones, es de lo más sofisticado y eleva cualquier estilismo. Esos pantalones capri blancos de J ackie Kennedy o Grace Kelly en vacaciones. Los pantalones de sastre y pata de elefante de Bianca Jagger que la convertían en una diva. Los vaqueros blancos que la siempre atrevida Lady Di lucia para los días de campo, con botas de agua. Tanta historia detrás de una prenda solo nos puede convencer de llevarla. El pantalón blanco es super fácil de conjuntar, queda bien a cualquier edad y da una sensación fresca y renovada al look, saliendo del confort de nuestros vaqueros. Por supuesto, debes encontrar los que mejor se adapten a tu estilo y a tu tipo de cuerpo: acampanados, rectos, culotte, de traje, tejido denim, con adornos... Una vez que des con tu pantalón blanco ideal, no vas a poder quitártelo. Sobre todo, con estas imágenes de inspiración para vestir esta prenda del modo más elegante y juvenil.
Esta idea tiene esa estética chic francesa despreocupada que a todas nos encanta. Y es muy simple. Camisa blanca básica con pantalón blanco, chanclas y bolso negro. Un look que pide ser llevado a la oficina.
Una propuesta que siempre resulta ganadora. Jersey a rayas estilo marinero con pantalón vaquero recto en color blanco, sandalias planas y un bolso negro sofisticado.
Estilismo minimalista compuesto de camiseta básica negra de tirantes, pantalones blancos con bajo remangado, cinturón, sandalias de tacón bajo en negro y bolso del mismo color. Super versátil.
Una propuesta muy veraniega con pantalones vaqueros en blanco, body (o bañador), bolso cesta y zapatos con cuña o tacón coloridos. ¡Sin olvidarnos las gafas de sol!
Elegante, romántico y femenino. Pantalones blancos de cintura alta combinados con una blusa semitransparente en rosa, con mangas abullonadas y lazada en el cuello. Unos tacones nude y un maxi clutch blanco como accesorios que crean un outfit perfecto para ocasiones especiales.
La modelo conjunta pantalones blancos de campana con bajo deshilachado, en clave más informal, con camiseta básica de tirantes en beige y americana color crema. Unas sandalias de tacón, también en tono neutro, convierten el estilismo en apto para un evento formal o ir a la oficina.
Total look en blanco con vaqueros, camiseta básica y blazer de lino. El sombrero beige marca la diferencia. Ideal para verano o primavera.
Un estilismo perfecto para entretiempo. Cárdigan marrón con mangas abullonadas, pantalón vaquero flare en blanco de cintura alta y botines de tacón color crema.