¿Qué tiene el estilo francés que triunfa allá por donde va? Esa fórmula de aparente sencillez, desenfado y elegancia sin complicaciones parece haberse hecho un hueco en el armario contemporáneo y todo apunta a que no tiene ninguna intención de abandonar o ceder un ápice de espacio a ninguna otra tendencia. Y es que, ¿quién puede afirmar no ser dueña de una prenda de rayas marineras? ¿O de un conjunto de cuadros vichy, el epítome del look francés que verano tras verano regresa con la misma frescura de la primera vez?
Todos estos ingredientes que viven en nuestro imaginario son los que Sézane ha sabido mezclar para dar forma a una marca que desde 2008 cautiva a las expertas en moda y arrasa en ventas desde su web, porque aunque puntualmente hace algún pop up, la marca no dispone de tiendas físicas permanentes.
La historia de Sézane comienza con una maleta olvidada y el amor por lo vintage. Al descubrir una colección abandonada de ropa vintage, Morgane Sézalory comenzó a hacer pequeños ajustes en las piezas y a vender sus hallazgos en línea con el nombre de «Les Composantes». Sus drops mensuales, se convirtieron en un evento al que Francia asistía con anticipación y ansiedad. Poco después, en 2013, Morgane se dio cuenta de que había encontrado su vocación y comenzó a complementar sus piezas vintage con sus propios diseños y así nació Sézane.
Con una filosofía arraigada en la sensatez, la firma apuesta por hacer de la calidad una inversión de futuro. «Creemos que las piezas que compramos hoy deben convertirse en la cosecha del mañana. Para lograr este ideal, creamos piezas atemporales que sobrevivirán a las tendencias fugaces y se adaptarán (casi) a todas las estaciones; creaciones realizadas con materiales ecológicos e innovadores por personas en las que confiamos», afirma su creadora.
Ahora, y con un ejército de fans entre las que se cuentan Bella Hadid, la firma acaba de lanzar su primera línea de gafas de sol. Un hito que de nuevo se ha convertido en un cataclismo que amenaza con colapsar su página web y agotar las existencias en cuestión de minutos. Y sino, a pruebas como esta nos remitimos: en 2017 una de sus chaquetas de lana amasó una lista de espera con más de 30.000 personas, gracias en parte a las muchas influencers que la lucieron en redes sociales.
Fabricadas en Francia, estas impecables monturas están elaboradas con acetato 100% italiano, tienen lentes anti-UV de categoría 3 para una protección óptima y vienen en un elegante estuche para poder llevarlas sin problema en tu maleta este verano.
Cuatro modelos diferentes que beben de esa inspiración retro que tantas alegrías le han dado a Morgane y cuyos precios oscilan entre los 120 y los 130 euros.
Desde el modelo redondeado Penelope con acabados en tonos carey y empolvados, hasta la línea Chiara, de pasta translúcida y más anchas. Piezas perfectas para combinar en looks más sofisticados y los más casuales, siempre en perfecta sintonía con ese allure francés que defienden.
Recién llegadas a su web, no podemos asegurar cuánto tiempo estarán disponibles antes de agotarse (como casi todos los productos que lanzan) pero sí podemos asegurar que la lista de espera para un nuevo lanzamiento no dejará indiferente a nadie.