Tatiana Santo Domingo y su hijo, Sacha Casiraghi. /
Aunque no se prodiga mucho en público, Tatiana Santo Domingo es una mujer con un estilo que siempre nos enamora. Da igual que sea en un acto oficial de los Grimaldi en Mónaco o en un circuito de carreras, porque esta socialitè y empresaria de moda de origen colombiano siempre acierta.
Abandera como nadie el estilo boho chic por excelencia, y por eso es conocida como la royal hippy de la familia de Carolina de Mónaco . En comparación con sus cuñadas Carlota de Mónaco y Beatrice Borromeo, Santo Domingo resulta más hippy y relajada en sus estilismos, pero igual de glamourosa.
Además, es una defensora y promotora de la sostenibilidad en la moda, y en 2011 creó Muzungu Sisters con su socia y amiga Dana Alikhani para poder colaborar con comunidades de artesanos de distintos lugares del mundo prendas y accesorios de alma slow. Y no baratos precisamente.
Socialitè, muy bien relacionada, la empresaria de moda es hija del multimillonario Julio Mario Santo Domingo Jr., un empresario colombiano ya fallecido, y de una exmodelo brasileña Vera Rechulski. Además, es nieta del aristócrata Julio Mario Santo Domingo, empresario e industrial y quien fue una de las mayores fortunas de Colombia. La nuera de Carolina de Mónaco ha tenido una vida propia de la heredera millonaria que es, educándose entre EE.UU. y varios internados en Suiza. Habla cinco idiomas y ha trabajado en temas audiovisuales.
Pero su gran pasión es la moda. Su estilo exquisito y bohemio la ha situado entre las royals más admiradas e inspiradoras del mundo, y en 2011 inició su propio proyecto fashion junto a su amiga y socia (y también heredera millonaria de origen iraní) Dana Alikhani.
Ambas son las creadoras de Muzungu Sisters, una marca de moda que trabaja con comunidades artesanas de todo el mundo en la creación de prendas y complementos de inspiración boho y chic. Y a precios aptos para que se haya confirmado como una de las etiquetas preferidas entre aristócratas y herederas como Olimpia de Grecia o Beatriz de York.
Vestido largo y con manga corta Clemence, de CHARO RUIZ (619 €). Gafas geométricas, con montura dorada, de MIU MIU (370 €). Vestido largo con mangas abullonadas, de SIMORRA (218 €). Bailarinas tipo merceditas en terciopelo, de VICTORIA (49, 90 €). Bolso tipo cesto, en rafia, de CARMELA ( 59, 95 €). Slippers tipo venecianas, en terciopelo burdeos, de CAYUMAS (94 €). Charms dorados con circonita, de THOMAS SABO (49 €). /
Tatiana es la mejor modelo de sus propios diseños, los luce en muchísimas ocasiones. Y sigue sorprendiendo ver a una joven y millonaria como ella –junto a Andrea Casiraghi es madre de tres hijos: Sasha, de once años, India de nueve y Maximiliam, de seis –, con un estilo tan aparentemente despreocupado y libre.
Casi nunca lleva tacones altos e incluso su presencia en el mítico Baile de la Rosa llama siempre la atención por sus estilismos de gala pero notablemente diferentes a los de sus cuñadas Carlota y Beatrice. Ella introdujo un soplo de aire fresco entre las damas de la siempre perfecta y chic (nada que objetar, por cierto) familia Grimaldi.
La empresaria de moda prefiere los vestidos con siluetas amplias , de líneas sencillas y con joyas también de inspiración boho. Su melena, casi siempre suelta y natural, también es muy característica en ella. Pero siempre con el lujo por delante.
Se codea con socialitès millonarias como ella de apellidos tan icónicos como Niarchos o Dellal, y aunque todas estas amigas destacan también por su increíble estilo a la hora de vestir, lo cierto es que santo Domingo tiene algo que la hace única.
Cuando empezó a ser conocida por su noviazgo con el sobrino mayor de Alberto de Mónaco, fueron muchas las royals y pijas de todo el mundo que querían parecerse a ella. También en España. Comenzamos entonces a ver en las bodas de la alta sociedad y la aristocracia looks de invitada más relajados de lo acostumbrado, con los vestidos de siluetas amplias e inspiración bohemia como prenda principal del look.
Eran tiempos de dejar atrás los trajes de chaqueta o esos vestidos tipo cóctel con un marcado estilo de «ocasión especial» para optar por looks inéditos hasta entonces en los que el vestido largo, de silueta amplia y bohemia se convertían en absolutos protagonistas del estilismo.
Comenzaron también a proliferar las marcas de moda especializadas en «vestidos de invitada», un concepto que ya nos remite a todas a esos diseños bohemios , estampados o no, y tan versátiles que pueden servir tanto para una boda como para una tarde de compra acompañados de chanclas o zapatillas. Exactamente como hace Tatiana Santo Domingo.
Vestido Marta, con manga larga, de PAR Y ESCALA (93, 75 €). Gafas de sol, con montura plateada, de PERSOL (185 €). Vestido Merceditas, largo y ancho, de LAS DE LA ISLA (71, 40 €). Sandalias François, en piel metalizada, de PRETTY BALLERINAS (113, 40 €). Bolso de hombro Louise, efecto rafia, de ROBERTO VERINO (112 €). Sandalias Sidney, con tacón medio y metalizadas, de EXÈ SHOES (79, 95 €). Pendientes con turquesas, de BA&SH (38, 50 €). /
Además, gracias a su ejemplo el calzado también fue cambiando llegando, incluso, a convertir el tacón medio y hasta plano en una opción bastante habitual entre las mujeres. También dejaron de verse tantos pendientes de joyería clásica para dar paso a piezas de formatos XL, en colores llamativos y con diseños bohemios.
Para hacernos una idea, Teresa Urquijo , Victoria de Marichalar o Sassa de Osma podrían ser algunas de estas jóvenes distinguidas que imitan, quizás sin darse cuenta, este estilo que ya puso de moda hace algunos años Tatiana Santo Domingo. Y es que esta fashionista, que siempre se ha inspirado en mujeres como Talitha Getty o Bianca Jagger rompió sin duda las reglas de estilo no escritas en la familia Grimaldi y, también, en el mundo de la moda en general.