Vestido de lunares de Zara que siempre vuelve. / D.R.

MODA

El vestido de Zara que siempre vuelve y me salvará este y todos los veranos

Cómodo, favorecedor y de lunares, lo tiene todo para ser la prenda más versátil de mi armario de verano.

La moda nos apasiona y nos emociona a partes iguales. Es el vehículo mediante el que reflejamos nuestra personalidad, de forma consciente o inconsciente, y cuando nos obsesiona una prenda no podemos parar de pensar en mil y una formas de llevarla. Algo que sucede a menudo con los vestidos de Zara que queremos llevar todo el verano, porque además son muy fresquitos, en concreto con un modelo que no nos quitamos de la cabeza.

Se trata de un vestido de lunares que no tiene nada de nuevo, pero lo tiene todo para ser el vestido más especial y favorecedor de todos tus looks de verano. La buena noticia es que todos los veranos vuelve a Zara y hacerse con uno de ellos puede suponer un salvavidas bastante útil para aquellas ocasiones en las que ser original pasa por reinventar los básicos de siempre.

Lo más especial de este vesitdo de lunares es su corte: con escote en uve y abertura en la pierna, su espalda abierta y sus mangas abullonadas lo convierten en el vestido perfecto para ir siempre chic. Nunca me he sentido tan elegante como cuando llevaba este vestido con una sandalia de tacón discreto para salir a cenar con mis amigas.

Con un bolso de mano y un moño bajo se se vuelve la opción más sofisticada de mi armario. Cuando me quiero sentir como una chica francesa lo combino de forma más desenfadada para ir a trabajar: unas bailarinas y un bolso de rafia a lo Jane Birkin hacen maravillas por sí solos, pero combinados con este vestido elevan cualquier estilismo al olimpo del buen gusto.

Si sus bondades estilísticas son infinitas, tal y como estamos viendo, lo mejor de este vestido es su tejido: la mezcla de lino en la que está confeccionado hace que sea perfecto para sobrellevar las altas temperaturas, pero impide que se arrugue tanto como si fuera 100% lino. Mi truco después de lavarlo ha sido colgarlo en una percha y me lo he puesto sin que nadie note que no está planchado.

Es este último dato el que me anima a ponérmelo incluso con deportivas, para dar un paseo relajado por el campo. Pero también lo veo con sandalias planas para dar un paseo de compras. Incluso lo utilizaría para la playa, pero me voy a abstener de hacerlo por miedo a que la prenda se estropee antes de tiempo.

El detalle de la espalda

Sin lugar a dudas, tengo muy claro que uno de los puntos fuertes de este vestido es su espalda. Nos encantan las espaldas al descubierto en verano, pero en ocasiones nos cuesta llevarlas a trabajar si son demasiado osadas, algo que no ocurre con este vestido.

Sus mangas abullonadas y las tiras que unen los dos trozos de tela de las escápulas me permiten llevarlo a trabajar sin sentirme incómoda por si llevo la espalda demasiado descubierta. Lo mejor de todo: está a prueba de aires acondicionados.

Estas son las mil y una razones por las que este vestido de Zara me parece perfecto y me obsesiona como no lo había hecho una prenda de ropa en mucho tiempo. Los básicos no tienen por qué ser aburridos, y las millones de formas de combinar este vestido lo demuestran. Otro truco de estilo: añade un collar langosta (tendencia este verano) y serás la reina de la playa.

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