Te casas, y en los próximos meses tendrás que tomar un buen número de decisiones importantes. La más decisiva (tu futuro marido) ya la has tomado, pero ahora toca elegir el tipo de boda que queréis, el lugar y la fecha, la lista de invitados, el destino de la luna de miel y, por si fuera poco, el que, probablemente, sea el look más importante de tu vida.

El universo nupcial cada vez es más infinito, y por eso, las opciones se multimplican en todos los detalles. En el plano que nos ocupa, la moda, está claro que el 'día B' serás la protagonista absoluta de vuestro cuento, pero eso no significa que tengas que ser una princesa. Ni tampoco que tengas que destinar buena parte de vuestro presupuesto a tu vestido de novia. Ni mucho menos que te lo pongas durante unas horas y tengas que guardarlo para siempre en el baúl de los recuerdos.

Tu vestido (¡o traje!) de novia será inolvidable, el más especial de todos los que guardas en tu armario. El día que lo elijas, deberá ser una decisión tuya y solamente tuya, no habrá luces de neón a su alrededor, como en las películas, y es probable que tampoco llores como una Magdalena cuando sepas que ese es 'tu vestido'. ¿Lo más importante que debes tener en cuenta? Debe ser fiel a tu estilo, un reflejo de ti, porque no hay error más grave (y por desgracia, habitual) en una novia que disfrazarse de alguien que no es el día de su boda.

Por eso, hemos hecho una selección de ideas para esas novias que se salen del guión establecido, que quieren un look con el que ir radiantes, pero no siempre 'blancas'; que se atreven a ir en pantalones o con un vestido corto; que no tienen miedo a apostar por el color; que quieren reutilizar esta prenda tan especial y darle una nueva vida más allá de su boda (¡incluso para ir a la oficina!); que quieren ser románticas, sofisticadas, cosmopolitas, 'boho', 'folk'...

Porque cada novia es un mundo, y nosotras tenemos 25 ideas bonitas para todas ellasen esta galería.