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Dicen que si piensas en grande, llegarás lejos. Y aunque es una de las firmas británicas con más presencia internacional, Burberry quiere ir más allá, y quizá por eso, por esa vocación global, Chritopher Bailey ha decidido decir adiós a las temporadas en la presentación de su última colección en la Semana de la Moda de Londres.
Ya no habrá más otoño-invierno sobre la pasarela, ni tampoco Bailey nos presentará sus propuestas para la primavera-verano. E l tiempo es relativo, ya lo decía Einstein (aunque es cierto que no se refería al clima), así que cuando en Europa estamos a bajo cero en el mes de enero, en Brasil se encuentran en Copacabana disfrutando del sol del estío. ¿ Qué sentido tiene, entonces, eso de las temporadas si no hace más que volvernos locas dependiendo de dónde viviamos y compremos? Por eso, desde ahora, las colecciones de Burberry se diferenciaran entre febrero y septiembre (del año en cuestión), que son los meses en los que se presentan.
Y aprovechando que ya no hay temporadas, el icono del 'brit style' hace caja: las prendas del desfile se podían comprar al momento, según se iba descubriendo la colección sobre la pasarela, como ya hiciera unos días antes en Nueva York Rebecca Minkoff. Y luego dicen que Zara y compañía son el baluarte del 'fast fashion'...
Hablando de la colección febrero 2016 de Burberry, la firma capitaneada por Christopher Bailey volvió a dar la enésima vuelta de tuerca a la estética setentera, a sus siluetas, colores y estampados, a los aires 'punk' con tintes 'boho' y al estilo militar en una nueva reinvención del trench (sí, parece mentira, pero aún le quedaba otra vida) como prenda icono de la casa.