
Mujer con vaqueros rectos con vuelta. /
Mujer con vaqueros rectos con vuelta. /
Cada temporada solía tener sus vaqueros estrella, muchas veces sujetos a una silueta innovadora o una terminación original. Los hemos visto bicolores, con el bajo asimétrico o con una vuelta XL, como la que ahora se lleva. Desterrados los pitillo , hoy los encontramos en todos los anchos, con siluetas dificilísimas como la 'carrot'. Ahora importa también el algodón y el agua que se ha utilizado en su confección o la cantidad de elastán que llevan en su tejido. Y es fundamental el tiro: de él depende al cien por cien la comodidad de unos 'jeans'.
Evidentemente, los factores que hay que tener en cuenta a la hora de adquirir un vaquero sin múltiples, cosa que complica la tarea de encontrar los ideales. Sin embargo, no conviene perder de vista que la calidad del tejido tejano suele ser proporcional a su precio y que el acabado y la resistencia del pantalón no será la misma en el low cost que en alguna de las marcas reconocidas por tradición o por innovación. Sí hay diferencia entre un vaquero de 30 euros y otro de 130 o de 200. Explora en las rebajas marcas como Spanx, si te gustan muy elásticos, o Good American. Te sorprenderán.
Por lo general, conviene apostar por las marcas clásicas, las reconocidas, para adquirir ese vaquero que va a estar muchos años en tu fondo de armario. Es el vaquero universal, ese que vas a ir reponiendo porque no vas a encontrar otro que te siente mejor y que encaje mejor en tu armario. Para la mayoría es el vaquero de pernera recta, tiro medio o alto y denim con el azul clásico: el 501 de Levi's . Son los 'jeans' de fondo de armario por excelencia que van con todo: bajo vestidos camiseros, con blazer y camiseta o una camisa blanca. Marcas especialmente elegantes a la hora de facturar 'jeans': la portuguesa Salsa Jeans, Khaite, Isabel Marant o Frame Denim.
Sobre este vaquero pueden hacerse variaciones para ajustar a cada silueta. Por ejemplo, la pernera puede ajustarse más a la pierna si eres bajita o te interesa estilizar la pierna. Las curvys preferirán una cintura alta más que a la cadera y, quizá, un ajuste elástico gracias a un porcentaje adecuado de elastán. Es interesante considerar tres colores: el denim claro de verano, el azul clásico o muy oscuro y el negro. No es ningún dispendio. Los vas a rentabilizar al máximo los tres.
Este es el vaquero que en uno o varios colores interesa tener en el fondo de armario . De hecho, si es nuestro favorito podemos multiplicarlo gracias al color: del blanco al mostaza, el caqui o el beis. A partir de aquí, todas las variaciones son bienvenidas, aunque no todas funcionan como un básico neutro que podemos llevar a todas partes. Un vaquero que conviene evitar, por su difícil combinación, es el que apuesta por la pata de elefante inspiración años 70. Es tan informal que cuesta combinarlo en un armario para mayores de 50 años. Sí podemos optar por una pernera ligeramente 'flare' , pero sin demasiados centímetro extra. Tampoco están en tendencia los famosos pitillo, aunque la lógica del péndulo que sigue la moda anuncia una inminente vuelta triunfal a la influencia.
Sí, después de los 50 años también podemos lucir vaqueros de tendencia, como prueban las influencers una y otra vez. Cinturas altas, ajuste ancho, dobles cinturas, perneras generosas y estampados originales encajan a la perfección en cualquier look diurno, incluso para ir a la oficina. Todos quedan estupendos con bailarinas, mocasines, botas o zapatillas. Sin embargo, hay que ser una genia del estilismo para combinar con acierto unos vaqueros cargo , con esos bolsillos utilitarios tan deportivos. Exigen, quizá, tacones, un calzado que después de los 50 solemos dejar para ocasiones especiales.
Lo ideal es acudir a las tiendas para probarse los vaqueros, pues la explosión de siluetas y los neologismos que las describen dan para mucha confusión. Pero incluso en la tienda, con las etiquetas boca arriba, es fácil despistarse entre dibujos y denominaciones. Aclaremos, por ejemplo, 'baggy' , que se refiere a los vaqueros de ajuste relajado y cintura alta. Los 'balloon' o 'horseshoe' son parecidos, pero buscan un efecto globo en la silueta, así que se ensanchan alrededor de los muslos. Si tienes las piernas muy delgaditas, te sentarán estupendos.
Los 'boyfriend' han estado en el top de la tendencia desde hace años por su comodidad: pretenden sentar como si hubieras robado los vaqueros de un armario masculino. Llevan el tiro bajo y caen rectos desde las caderas. Son similares a los 'mom', los 'jeans' qUe llevaban las madres en los 90, con la cintura alta y la cadera generosa, y los 'slouchy', muy anchos en toda su extensión pero ajustados en el tobillo. Las perneras anchas se denominan 'wide' y pueden ser tremendamente exageradas, pero pueden ser los elegantes 'palazzo', con sus pinzas y bolsillos laterales.
Ya hemos hablado de los 'flare', que se ensanchan desde la rodilla: los que mejor sientan son los que se ensancha ligeramente, no los que tienden a la pata de elefante. La tendencia apoya ahora los 'low rise', o sea, los de tiro bajo o bajísimo, pero tampoco son demasiado favorecedores para todas. Los 'carrot' llevan pinzas en la cintura y son anchos hasta las pantorrillas y tobillos, donde se ajustan. La sensación de la temporada son, sobre todos, los 'cuffed jeans', o sea, los vaqueros de pernera generosa con el bajo vuelto. Pero que sea casi un palmo sobre la pierna. No menos.