La reina Letizia sí que sabe cómo se llevan los pantalones culotte para estilizar los tobillos y alargar las piernas

Doña Letizia conoce a la perfección las siluetas que mejor le sientan, las prendas que realzan su figura, los colores que más le favorecen y los complementos que rejuvenecen sus looks. De un tiempo a esta parte, además, ha hecho una aplaudida apuesta por la comodidad sin renunciar a la sofisticación y se ha erigido como la mejor embajadora de la moda 'made in Spain' . Todo ello nos lleva a afirmar sin lugar a dudas que la reina está viviendo su mejor momento de estilo en años. Sus lecciones de estilo son constantes y, hasta de un estilismo de apariencia sencilla como el que ha lucido en su primer acto de la semana , podemos sacar un práctico manual de uso de una prenda que tiene tantos amantes como detractores: el pantalón culotte.

Digamos que los pantalones culotte no son los más fáciles de llevar. Las bajitas tienen 'miedo' a que les haga aún más pequeñas; las altas, que su largo quede más corto de lo que debería; las curvies, que las ensanche y las delgadas, que languidezca su figura. Sin embargo, el secreto no está tanto en la prenda sino en cómo llevarla para exprimir todo su potencial sartorial. Y la reina Letizia es el mejor ejemplo .

La reconocible silueta de los pantalones culotte (anchos, midi y con cintura marcada) lleva varias temporadas arrasando entre las tendencias. Pero, precisamente, en los matices es donde está la diferencia (y donde entra en juego el buen gusto de la reina para lucirlos): en vez de elegirlos por debajo de la rodilla o a mitad de la pantorrilla, doña Letizia prefiere los modelos tobilleros, con los que consigue unas piernas mucho largas y delgadas.

Además, doña Letizia sabe que puede presumir de cintura, así que siempre los luce con talle bien marcado con cinturón, consiguiendo así estilizar aún más la silueta. Para potenciar aún más el poder 'estilizador' de los culotte, la reina los incorpora en looks monocolor, creando una sofisticada armonía que sienta de maravilla; con suéters o jerséis ajustados metidos por dentro del pantalón, realzando así la figura, y combinados con tacones muy escotados, de manera que las piernas se alargan visualmente.