Fue en las Campanadas de 2019, cuando Cristina Pedroche volvió a convertirse en la protagonista de la última noche del año debido a sus look. Un estilismo con el que sorprendió al dejar a un lado las transparencias y las prendas mini y al apostar por un vestido escultura que era toda una obra de arte y que firmaba Jacinto de Manuel. Y, como cada año, se trataba de una elección que generó un sinfín de comentarios al respecto -tanto negativos como positivos- y que no quedó exento de polémica. Dos años después, parece que ese top tipo escultura ha calado hondo convirtiéndose ya en una tendencia.

Y es que, este tipo de prendas han pasado por las pasarelas siendo ya una de las propuestas fashion más arriesgadas de algunas firmas de lujo. Piezas que aúnan moda y arte y que son aptas única y exclusivamente para posar ante las cámaras. Pero parece que poco a poco se están adaptando al mundo real y hemos pasado de verlas en desfiles, a las alfombras rojas e incluso a influencers.

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Bella Hadid se colocó entre las mejor vestidas de la alfombra roja del Festival de Cannes gracias a un vestido negro con un impresionante collar de latón dorado inspirado en los pulmones humanos del diseñador Daniel Roseberry para la colección de otoño de 2021 de Schiaparelli. Desde la firma describen esta impresionante pieza como «pulmones de trampantojo dorado con pedrería» y la modelo arrasó uniéndose a esta tendencia tan arriesgada.

@chiaraferragni

De la alfombra roja, al mundo influencer. Chiara Ferrgni, que se atreve con todo, apostó por un diseño muy similar al que lució Cristina Pedroche para asistir a una entrega de premios. Se trata de un busto dorado fabricado en resina metalizada y adornado con un collar de candado que combinó con pantalones extra anchos de lana en azul marino y zapatos de tacón de satén negro con puntas doradas y uñas plateadas. Un outfit que también firma Schiaparelli y que no dejó indiferente a nadie.

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Ahora, la última en confirmar que la tendencia de los tops esculturales ha llegado para quedarse ha sido Elle Fanning. La actriz fue la protagonista de una gala de premios de una conocida revista gracias a una impresionante pieza que pertenece a la firma Balmain y que está bañada en oro y adornada con enormes cristales que simulan a los diamantes. Otra obra de arte que, según explican desde la marca, fue necesario fundir el metal y torcerlo para que se pareciera a una cadena y, a su vez, pudiera sujetarse a su cuello.

Ahora, la pregunta es, ¿veremos dentro de poco esta tendencia en el low cost? Es probable que las firmas se atrevan con detalles que simulen estas piezas, pero en versión mucho más pequeña y discreta. Todo es posible...