He tenido, tengo, una vida profesional muy feliz. La suerte de haber puesto en marcha proyectos apasionantes. De dirigir equipos brillantes, como este, de los que aprendo. De sentarme cada mañana para iniciar un camino nuevo que me exige, me obliga a esforzarme, a buscar nuevos recursos, nuevas historias para estar a la altura de quienes nos leen. Soy extremadamente afortunada y lo sé. Y aún así, cuando miro atrás, mi carrera, la de mis amigas, la de mis compañeras, tengo la sensación de que tuve que dar rodeos, hacer elecciones.
De haber sido vista en ocasiones de otra forma, adecuada o no adecuada para ciertas tareas, ciertas promociones, con el filtro de mi edad en cada momento, mi situación o el miedo a que dedicara más o menos tiempo a según qué cosas, dependiendo de lo que se suponía que me esperaba en casa. ¿Creo que me he esforzado más? Estadísticamente, sí. ¿Creo que he cobrado menos? Estadísticamente, también.
Esta crisis, como todas las crisis, golpeará más al empleo femenino. Lo advierte la Organización internacional del Trabajo y lo sabemos por experiencia. Los desastres económicos, magnifican la desigualdad. La pandemia, que destruirá 25 millones de empleos si no somos capaces de evitarlo, no distingue entre mercados, países o continentes, pero sí se cebará en los trabajos parciales, los contratos precarios, las situaciones y los sectores donde las mujeres son mayoría. Espero que el miedo, la precariedad, las dificultades no conviertan en un espejismo avances que hemos vivido como logros comunes, victorias que estaban siendo victorias de todos, la sensación de que la igualdad no es un lujo, sino una necesidad.
Pienso en mi hija adolescente que ha crecido pensando que puede, que debe tener lo que de verdad le haga feliz. Que los hijos son la responsabilidad de las familias, no de las madres. Que su salario dependerá de su esfuerzo y sus méritos. Pienso en ella y en que ojalá su futuro no entre en cuarentena.
20 de enero-18 de febrero
Con el Aire como elemento, los Acuario son independientes, graciosos, muy sociables e imaginativos, Ocultan un punto de excentricidad que no se ve a simple vista y, si te despistas, te verás inmerso en alguno des sus desafíos mentales. Pero su rebeldía y su impaciencia juega muchas veces en su contra. Ver más
¿Qué me deparan los astros?