Esta ha sido una semana de aprendizaje. La primera lección me la han dado dos alumnas de Periodismo que me escribieron para pedirme una entrevista. Necesitaban hablar con algún director de un medio de comunicación como parte de un trabajo de una asignatura que recuerdo como si me hubiera examinado ayer: Empresa Periodística. Muchos años después de que el brillante profesor Tallón nos recomendase una y otra vez no emprender negocios con amigos, dos estudiantes muy serias aparecen en la pantalla de mi ordenador con un cuestionario que podría ser el de mi directora financiera a final del trimestre. Preciso, concreto e implacable. Hablamos de ingresos, de gastos, de cambio de modelo, de digitalización, de redes sociales, de periodismo de pago. Y al final, me preguntan algo así como si hay esperanza para ellas que estudian el primer año de una carrera en crisis en un país en crisis, en un mundo en crisis.
Sí, les digo. Y lo creo. El éxito, lo que cada uno entendemos por éxito, tendría que ser un anhelo irrenunciable a los 20, sí, pero durante el resto de nuestra vida, también.
Dos días después, celebramos nuestro primer encuentro con cinco de las 50 mujeres que elegimos como parte del proyecto Generación Next, una conversación que quizá algunos de ustedes vieran en streaming a través de nuestra web. Mujeres que ya destacan en la empresa, en el deporte, en el arte y que, estamos seguros, serán las próximas líderes indiscutibles de sus sectores en los próximos años. Les pregunto por la ambición, por sus carreras, por su logros, por sus frenos, por sus impulsos. Me parece que coinciden en algo muy importante y desde luego, nada evidente: el mayor de los obstáculos a veces está dentro de nosotros mismo, el mayor de los logros casi siempre es el que no depende de la mirada de los demás.
Señora catedrática de Empresa Periodística de la Universidad Complutense, espero que este trabajo no baje del sobresaliente. Si por algo se reconoce a un buen periodista es por su habilidad para hacer preguntas. Y si algo nos da la medida del talento, es la brillantez de las respuestas. Gracias a todas.
20 de enero-18 de febrero
Con el Aire como elemento, los Acuario son independientes, graciosos, muy sociables e imaginativos, Ocultan un punto de excentricidad que no se ve a simple vista y, si te despistas, te verás inmerso en alguno des sus desafíos mentales. Pero su rebeldía y su impaciencia juega muchas veces en su contra. Ver más
¿Qué me deparan los astros?