Leyendas urbanas sobre el bronceado

Mitos y verdades sobre la protección solar

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   El maquillaje se puede aplicar encima del protector solar. Poder se puede pero no es buena idea. Debe esperarse entre 5 y 10 minutos para que el protector sea absorbido por la piel antes de pensar en poner una base encima. Si el tiempo no abunda se puede optar por las versiones de maquillaje con protección incluida. Eso sí hay que retocar cada tres o cuatro horas para que no pierda eficacia.

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   Si ya estás bronceada no te quemarás. "Un 30% de la población española no renueva suficientemente la protección solar”, según los datos de Avène. Sin embargo la piel, aún estando morena, debe ser protegida de quemaduras, y daño celular.

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   Si está embarazada te saldrán manchas. No es cierto, tampoco que las manchas solo salgan a las mujeres embazadas, que sí tienen mayor riesgo de melasma cuando toman el sol. Durante el embarazo, los cambios hormonales activan los melanocitos que, junto a la exposición al sol, favorece la aparición de manchas. Los melasmas son manchas de color marrón y bordes irregulares que suelen aparecer en la zona media del rostro. Cuanto más oscuro sea nuestra piel más riesgo tendremos.

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   En días nublados no necesitamos protección. Es falso, las nubes pueden incluso aumentar la radiación solar porque crea un efecto reflectante. Incluso, en los días fríos los rayos UVB siguen activos.

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   Con protección solar nunca me pondré moreno. Falso. Aunque pueda parecer que una persona se está bronceando menos o más despacio, en realidad está adquiriendo color gradualmente de color, se está reduciendo el riesgo de quemaduras y, además, una vez que se consiga el bronceado, será más uniforme y duradero.Ten en cuenta que la protección de la crema solar frente a la radiación UV-B no es del 100%..