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Perfumadas y deliciosas, estas setas te aseguran fibra, minerales -cobre, potasio, zinc, selenio...-, vitaminas del grupo B y proteínas, todo ello con aromas de bosque y una cantidad ridícula de calorías. ¡Por algo jamás faltan en las cocinas de los grandes chefs!
Por si fuera poco, la ciencia añade ahora otras razones para incorporar boletus edulis a la dieta: un nuevo estudio indica que tienen potencial anticancerígeno y que podrían ser una opción terapéutica frente al temible cáncer de colon.
Quedan exquisitos con pastas, arroces, con cebolla caramelizada, en revueltos, ragús, platos de caza e, incluso, con pescados. Puedes comprarlos frescos o deshidratados (estos hay que remojarlos durante una hora antes de cocinarlos), recordando que un gramo de setas deshidratadas equivalen a 10 gramos de setas frescas.
Cuece un paquete de tagliatelle integrales tal como indica el paquete. Mientras tanto, pocha suavamente una cebolleta picada y dos ajos laminados.
Añade un bol de boletus en láminas gruesas y deja que suden y se ablanden. En una fuente honda, mezcla la pasta cocida con las setas pochadas.
Perfuma con orégano seco y pimienta negra recién molida. Puedes añadir unas nueces picadas.