vivir
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En primavera. La exposición solar que requiere nuestro organismo para obtener la dosis recomendada de vitamina D depende de la estación del año. De abril a julio, si dejamos un 25% de nuestra piel al aire (del fototipo III, eso sí, el más común en España), con 10 minutos al día es suficiente. Pero las cosas se complican en los días y meses nublados.
En invierno. El Grupo de Investigación en Radiación Solar de la Universidad Politécnica de Valencia (UPV) ha analizado el tiempo necesario de exposición para obtener nuestra dosis de vitamina D sin arriestarnos a quemarnos. Los resultados afirman que casi nadie cumple con la media. ¿Por qué? Porque en un mediodia de enero, con solo un 10% de piel al aire, necesitamos... ¡130 minutos!
La insuficiencia crónica de vitamina D se asocia con mayor riesgo de enfermar. Como pocos alimentos la contienen (lácteos y pescados azules), su síntesis a través de la piel es la principal fuente natural que existe. Si embargo, el de vitamina D es el déficit nutricional más frecuente en los españoles.