vivir
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En etapas. Descansa 20 minutos cada 200 kilómetros. Los estudios demuestran que si pasas cuatro horas al volante tardas el doble en reaccionar ante un imprevisto.
¿Cafeína? Descansa bien la noche anterior y no te la juegues todo a la carta del café. Se ha comprobado que estos estimulantes no evitan la aparición de microsueños de cuatro o cinco minutos.
Revista el botiquín. Unos 11 millones de conductores reconocen que no leen los prospectos de los medicamentos que toman, pero muchos de ellos afectan a su forma de conducir. Las benzodiacepinas, que se usan contra la ansiedad y los trastornos del sueño, y los analgésicos metamizol y tramadol están en esa lista.
Tener sueño y conducir es incompatible. A pesar de ello, en nuestro país 14,4 millones de conductores admiten que, si sienten sueño al volante, prefieren forzar al máximo antes que detenerse. Una conducta peligorsa que cuesta vidas. Se estima que solo en los últimos cinco años se han producido 20.600 accidentes y alrededor de 800 personas han perdido la vida por la somnolencia al volante.