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Alerta resfriado. Tal vez has empezado estornudando, pero ese resfriado puede llegar a complicarse si llega a los oídos. "Es frecuente que en invierno la faringitis, la gripe o un simple catarro vayan acompañados de otitis", afirma el otorrinolaringólogo Juan Royo.
¿Cómo evitarlo? Las medidas más sencillas y eficaces son, por un lado, vacunarse de la gripe y, por otro, reforzar las defensas del oído asegurando que no te faltan los nutrientes necesarios. Para ello, procura tomar alimentos ricos en vitamina C (kiwi, mandarinas, naranjas...); vitamina A (como los pimientos y la calabaza); ácido fólico (lo encuentras en las verduras de hoja verde); vitamina E (frutos secos crudos y aguacate); zinc (ciruelas y chocolate negro) y vitamina B12 (huevos, lácteos y carne).
Utilizar orejeras o ponerse un gorro de lana ayuda a aislarnos del frío, evitando la penetración de microbios en los oídos. Además, para tener unos oídos sanos hay que mantenerlos limpios, usando difusores de agua marina. Por último, recuerda que tras sufrir una otitis es muy importante someterse siempre a una revisión auditiva.
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