Respira, no es refinado

Este ingrediente natural se extrae del néctar de las flores de la palmera cocotera. Después de sufrir la evaporación, al fuego de esa savia, cambia de color y se convierte en una sustancia color tostado, cristalizada en azúcar de coco. Pero no nos engañemos, lo que más nos gusta de este edulcorante es que mantiene la sensación de saciedad por más tiempo y evita que caigamos en otros pecados menos saludables.

Azúcar de coco / gtres

Endulza, es sano y aporta propiedades beneficiosas al organismo. A partir de ahora, no habrá culpabilidad por chuparse los dedos con un postre suculento (siempre y cuando esté endulzado con azúcar de coco).

Algunas de sus bondades

Su bajo índice glucémico lo hace perfecto para diabéticos ya que evita que se dispare el azúcar en la sangre. Mientras el azúcar blanco tiene un 59, el de coco tiene sólo el 35.

Es sabido por todos que el azúcar blanco posee calorías vacías (no aporta nada en absoluto). Por el contrario, el de coco contiene algunos nutrientes como sales minerales, calcio, hierro, potasio o zinc.

Sus niveles de calcio y vitamina C lo hacen importante para fortalecer el sistema inmunitario del cuerpo.

Su proceso de elaboración no es industrial sino natural, por ello es más sano que el azúcar refinado.

Por último, cabe destacar que la savia de coco, principal fuente del azúcar, aporta 12 de las vitaminas B esenciales, cuya ingesta es positiva para tratar la ansiedad, la depresión y otros desequilibrios emocionales. Eso sí, no se nos puede ir de las manos su consumo ya que, aún con todo, tiene un 70% de sacarosa. Moderación.

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