El hummus es barato y fácil de hacer. Su popularidad ha crecido mucho en los últimos años gracias a sus dos grandes beneficios: Su capacidad para quitar el hambre y que es un alimento libre de gluten de forma natural.

El hummus tradicional está hecho con una mezcla de garbanzos, aceite de oliva, tahini (una paste de sésamo), limón y otras especias. Su composición ofrece más vitaminas y minerales que otros plato para picar entre horas, pues contiene calcio, folato y magnesio.

Esta mezcla de nutrientes tiene la capacidad de estabilizar el azúcar en la sangre por lo que ayuda a prevenir la enfermedades cardiovasculares. En su formula está presente el trío perfecto de la prevención: grasas saludables, proteínas y fibra, que te mantienen satisfecho, lo cual es clave para controlar el peso.

Lo cierto es que aunque el original es con garbanzos, últimamente hemos visto como darle una vuelta de tuerca y sustituir este ingrediente por berengena, lentejas o brócoli.

El brócoli es un vegetal saludable que aporta una gran cantidad de vitaminas, minerales y fibra. Es una de las verduras más nutritivas, además de rica en antioxidantes y con muy pocas calorías. Comerlo tanto al vapor, cocido o asado es una magnífica opción.

Ingredientes:

- 2 cucharadas Aceite de oliva

- Ajo

- Sal

- 2 cucharada de Tahini

- 1/2 kilo Brócoli

- 2 tazas Garbanzos cocidos

- Zumo de limon

- Comino

Instrucciones:

Cocer el brócoli al vapor

En el vaso de la batidora añadir todos los ingredientes menos el agua y batir hasta que quede una crema suave y homogénea.

En caso de que quede muy espeso puedes añadir unas gotas de agua.