Cinco alimentos que te darán un chute matutino

Según los últimos datos sobre la población española recogidos en el estudio ANIBES, el 85 % de la población desayuna habitualmente, el 11 % lo realiza de forma irregular y un 5% no suele desayunar. De ese 85% la mayoría prefieren algo liquido, tostadas, galletas, cereales o bollería. En definitiva, costumbres poco prácticas y saludables ya que, se ha comprobado que la proteína y los hidratos sanos, deberían ser los protagonistas de tus mañanas.

La Fundación española de la Nutrición (FEN) recomienda que el desayuno de los adultos incluya leche o derivados lácteos por su contenido en calcio y vitamina D, indispensable para la salud ósea. Cereales, que aporten los hidratos de carbono necesarios para afrontar el día y poca grasa. Fruta, con todos sus nutrientes y vitaminas y otros alimentos con grasas saludables.

Puede que, como se ha dicho ya en algunas ocasiones, no sea la comida más importante, sin embargo, es la primera y la que nos ayuda a comenzar el día con energía o, por el contrario, cansados y sin combustible.

Por eso, los expertos recomiendan añadir alimentos energéticos que pongan en alerta al cerebro para que no decaiga.

- Carbohidratos saludables. Es decir, de absorción lenta para que no produzcan picos de azúcar en sangre y nos hagan salir corriendo a picar snacks a media mañana. Estos son, por ejemplo, el pan de centeno y la avena que se pueden mezclar con yogur o leche. Estos ingredientes aportan todos los nutrientes que necesita el cerebro para mantener la concentración y la creatividad.

- Huevos. No se puede abusar, pero tres veces por semana, aportan proteínas de alta calidad y aminoácidos esenciales que interactúan bien con las hormonas. Además, mejora los neurotransmisores asociados con el estado de ánimo. Por eso es una buena idea tomar un huevo duro dos o tres veces a la semana para el desayuno.

- Proteínas bajas en grasa: Es decir, nada de salchichas ni bacon. Estas grasas saturadas hacen lo contrario a lo que buscamos: aumentan los niveles de colesterol y reducen la energía. Pero, comenzar el día con unas legumbres (lentejas, frijoles o garbanzos) te hará estar más despierta y lista para lo que depare el día.

- Frutos secos. Si lo tuyo no son unas judías mañaneras, prueba a tomar un puñado de nueces, cacahuetes o almendras o un sabroso coctel de frutos secos. Estos alimentos combinan grasas saludables, carbohidratos y proteínas vegetales y te dan mucha energía, que es el objetivo del desayuno. Por otra parte, como contienen fibra, proporcionan una buena cantidad de glucosa y otros nutrientes que reparan el daño muscular y regulan el metabolismo.

- Batidos de frutas. Prueba a mezclar manzana, pera, naranja y cualquier fruta que se te antoje. Notarás un subidón que durará toda la mañana y sin necesidad de cafeína.