¿Sabías que el embarazo es contagioso?

Hablar de bebés es algo bastante habitual entre amigas, compañeras o vecinas. Es una de las conversaciones favoritas cuando llega cierta edad, pero eso no significa que sea una carrera contra reloj ni una competición entre nosotras. Sin embargo, según estudios realizados por la Universidad de Bamberg en Alemania, que realizó algunas pruebas con 42 mil mujeres trabajadoras en empresas diferentes, pudieron confirmar que al año siguiente de que una de las empleadas diera a luz, se incrementaron las posibilidades de que sus compañeras desearan convertirse en madres.

Otro estudio realizado por el Instituto Nacional de Salud en la Adolescencia en Estados Unidos, confirmó que los embarazos planificados eran más frecuentes después de que alguna amiga cercana hubiera sido mamá.

La razón es que muchas mujeres tenemos un gran instinto maternal y al ver un bebé ajeno nos emocionamos. Si la mamá de ese bebé es nuestra amiga cercana, las probabilidades de que nos embaracemos aumentan, ya que crece la autoconfianza y se despierta el sentimiento maternal aumentando la motivación y seguridad para concebir.

Todo es cuestión de un factor emocional muy fuerte que toca nuestra sensibilidad interior. Cuando esa amiga se queda en estado, algo dentro te dice que tú también puedes y que no es tan difícil. Esto da lugar a que el inconsciente actúe y al final dejemos de utilizar anticonceptivos y nos volvamos un poco más valientes y lanzadas.

Psicológicamente, somos seres sociales y actuamos en grupo, por lo cual, tampoco es raro que detrás de una mujer embarazada vayan unas cuantas más de su entorno.