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Hay una palabra mágica que lo cura todo (y no, no es chocolate) sino aloe vera: la planta medicinal por excelencia que le pone remedio a cualquier cosa.
¿Tienes una quemadura? Ponte aloe vera. ¿Tienes la piel deshidratada? Ponte aloe vera. ¿Te ha picado un mosquito? Ponte aloe vera. ¿Te va mal en la vida? Cómprate una planta de aloe vera. Bromas a parte, es cierto que esta planta vale para todo. Tiene incontables beneficios para la salud que seguro, conoces a pies juntillas, pero... ¿Y si te dijeramos que también se puede consumir?
El aloe vera es una planta llena de nutrientes y muy rica en minerales como el magnesio, el potasio, el sodio, el calcio, el fósforo, el cobre, el cinc o el hierro, componente que se encuentra en su hojas de forma primordial por lo que se convierte en un aliado para tratar la anemia. Contiene vitamina E, C y ácido fólico y protege el intestino para prevenir el estreñimiento.
Otro de sus componentes estrella es la antraquinona una sustancia muy usada en medicina y farmacia para tratar infecciones o enfermedades gastrointestinales. También funciona como laxante natural y tiene un gran poder saciante. Por lo que si estás a dieta, es el ingrediente perfecto para tus smoothies.
¿No sabes cómo comerlo? Tómalo en té, en licuados o incluso en ensaladas y sopas. Ahora que viene el verano, lo mejor que puedes hacer es incluirlo en bebidas frías cortado en pequeños dados.
Las combinaciones son infinitas. Sin duda, necesitas un aloe vera en tu vida. Además, ahora que seguro haces de la playa tu segundo hogar, además de comértelo te puede ayudar con las quemaduras solares. No hay planta más polifacética.
Propiedades del aloe vera
Beneficios del aloe vera
Infusiones con beneficios para tu salud