De cómo una ensalada puede realzar tu bronceado

Sabido es que determinados pigmentos presentes en las plantas, de los que el betacaroteno es probablemente el más conocido, no sólo favorecen el bronceado , sino que en algunos casos ayudan a proteger la piel de la radiación solar y en otros a prolongar el moreno. Los avances en la cosmética nos proporcionan muchos de estos micronutrientes, pero también nuestro organismo puede adquirirlos por medio de la alimentación.

Así que desde aquí proponemos sustituir la operación bikini, que tantas frustraciones produce, por la operación ensalada ya que, si bien ambas inciden en la cuestión estética, por lo menos la segunda se preocupa por la salud de la piel previniendo su envejecimiento a causa de una exposición excesiva al sol.

Algunos les llaman los súper alimentos para la piel porque tienen un potente antioxidante llamado betacaroteno. Son frutas y hortalizas con pigmento rojo-anaranjado como las zanahorias, los boniatos, los tomates, el melón, la sandía o la calabaza, entre otros. Los betacarotenos son provitaminas que el hígado transforma en vitamina A. La vitamina A es fundamental para una piel sana, uñas y el sistema inmunitario, y por lo visto también para conseguir un resplandor veraniego.

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Pero no solo las frutas y verduras de color naranja pueden ayudarte a broncearte. Las verdes de hojas oscuras también son conocidos por sus habilidades para mejorar el bronceado. Contienen grandes cantidades de betacaroteno y son conocidos por sus capacidades para mejorar la pigmentación. Por lo tanto, incorporar más lechuga romana, espinaca, judías verdes en nuestra dieta también nos saca el color de verano.

Cualquiera de estos manjares es idóneo para elaborar una ensalada, un plato que entra más que bien en esos meses de calor en los que muchas veces vemos mermado nuestro apetito.

Alimentos ricos en Vitamina B, como la pasta y los cereales integrales, contribuyen a la elasticidad de la piel protegiendo el colágeno. Vitamina C: Todos los cítricos, las frutas rojas, los kiwis, la papaya y verduras como las coles y las espinacas son muy ricos en este nutriente que es también antioxidante y protege el colágeno y la elástica, todo bueno para la piel. La Vitamina E: se encuentra en los cereales, frutos secos y legumbres. Su acción antioxidante combate a los radicales libres, que son moléculas inestables responsables del envejecimiento.

También serán nuestros aliados los ácidos grasos, pues hacen que el bronceado dure más. Se encuentran habitualmente en los aceites vegetales -especialmente el de oliva que es el rey de la cocina española-, y en los frutos secos , y aunque no son exclusivos de estos alimentos, sí son los que mejor se adaptan a una elaboración sencilla como la típica ensalada de verano.

Pero no sólo la ensalada te da el tono. También los batidos pueden ayudar a tal fin. La nutricionista Yolanda Pascual también comparte con nosotras una de sus elaboraciones estrella para contribuir a este efecto de piel dorada, pero eso sí, desde la seguridad que proporciona la sombra. “Los batidos verdes son tus aliados para este verano, tanto para broncearte como para protegerte de los radicales libres que se producen por la exposición solar. Un batido para comenzar el bronceado y proteger tu piel podría incorporar lo siguiente: una manzana verde, un kiwi gold, un cuarto de limón pelado, dos hojas de acelga, semillas de cardamomo, un puñadito pequeño de cilantro, una hoja de albahaca, media cuchara de postre de lino molido, y 300-400 ml de agua, dependiendo de la consistencia que se le quiera dar”.

Crédito foto: Leonardo Gutiérrez Hernández

Por último y más allá de los consejos para llegar a nuestra piel a través del paladar, siempre hemos de tener presente los básicos para el bronceado: Protección solar en exteriores, hasta para ir a la compra, mucha agua para mantener la piel hidratada, con o sin sed, y por supuesto evitar la exposición solar en las horas punta y más de los 30 minutos recomendados por los especialistas.