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Sumergirse en una bañera helada no es precisamente una propuesta sugerente. Y menos aún ahora que el otoño golpea fuerte. Pero es una práctica que se ha puesto de moda, especialmente en el mundo celebrity y concretamente entre deportistas para la recuperación después de hacer ejercicio. Ya habíamos visto cómo Cristiano Ronaldo se sumergía en baños de hielo después de los partidos pero esta vez ha sido Lady Gaga quien ha recurrido a esta técnica, también denominada crioterapia.
Lo hace para recuperarse tras el esfuerzo al que se somete durante sus conciertos. Que no es poco, teniendo en cuenta que la cantante tiene que lidiar además con los dolores que padece como consecuencia de su fibromialgia.
De esta guisa posaba hace unos días en Instagram: sumergida en una bañera llena de cubitos de hielo mientras explicaba que se ha convertido ya en una rutina.
"Mi rutina post concierto: un baño de hielo de 5 a 10 minutos. Después un baño de agua caliente de 20 minutos. Y por último, un traje comprensor con hielo durante 20 minutos más", explicaba Gaga a sus seguidores.
Es la pregunta que no podemos evitarnos hacer: ¿son realmente efectivos estos baños de hielo o simplemente suponen una moda más? Hemos consultado al fisioterapeuta y osteópata Ricardo González Castelló, miembro de Doctoralia, para que nos aclare las du-das respecto a los baños de hielo. Porque, para empezar, no es algo que todo el mundo puede hacer. "No está recomendado para aquellas personas con anomalías cutáneas, hipersensibilidad al frío o para quienes tengan lesiones cutáneas", nos aclara el experto. "Tampoco en casos de patologías cardíacas y epliepsias o en ancianos y niños", añade.
Pero regresando a la pregunta inicial, bañarse en hielo sí tiene beneficios a nivel muscular. González Castelló nos cuenta cuáles: "El frío cierra los capilares, por eso al salir del agua se genera una hiperemia intensa (aumento de la sangre) que mejora el aporte sanguíneo en la zona, proporciona oxígeno y disminuye la fatiga muscular".
Y es que el frío es efectivo en la recuperación muscular, pero especialmente después de actividades aeróbicas y de resistencia. De ahí que Lady Gaga lo emplee después de las dos horas aproximadas que duran sus conciertos, donde no para de moverse con sus coreografías.
En esto la cantante saca sobresaliente, pues sigue las recomendaciones de los expertos al pie de la letra. "Lo ideal es entrar en cubetas y aguantar unos segundos, después salir del agua, abrigarse con una toalla o albornoz y repetir la operación de tres a cinco veces más", nos explica el fisioterapueta.
Y en cuanto a la duración: "Para los más valientes, se puede aguantar entre cinco o 10 minutos dentro del hielo. El agua debería estar a una temperatura aproximada de 12 - 15 grados".
Hay que tener en cuenta que estos baños de hielo no se hacen por gusto, sino como tratamiento cuando existe una lesión o una necesidad de recuperación muscular. Por eso no se deben tomar a la ligera. "En fisioterapia se utiliza mucho la crioterapia en casos donde se necesita reducir la inflamación, especialmente en las primeras horas de lesiones agudas como esguinces, contusiones o hematomas", aclara el experto. "También se emplea en el postparto o en fascitis. El frío nos ayuda a reducir el dolor, no olviemos que su principal acción es analgésica".