vivir
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Decidirse por comenzar una dieta, saber cómo controlar todo lo que comemos y qué hacer exactamente para poder quitarte esos kilos que te resultan tan difíciles no es tarea fácil. Muchas veces modificar nuestra rutina con cambios bruscos, someternos a algunas restricciones alimentarias o practicar algún deporte que nunca habías hecho antes... no son la solución para conseguir tu objetivo. Simplemente modificar algunas de tus costumbres y cambiar estos pequeños gestos en tu vida cotidiana pueden ser lo que estás buscando.
Moverte más a lo largo del día y cambiar hábitos en este sentido pueden ayudarte más de lo que piensas. Ahora casi todos tenemos una pulsera o reloj inteligente que nos mide los pasos que damos al día. Ponte un objetivo y proponte cumplirlo de forma diaria, sin darte cuenta estarás quemando más calorías de lo que piensas y además, estarás adquiriendo un hábito muy saludable: caminar más y mantenerte activo todos los días.
Las comidas no tienen por qué llevar azúcares ni ingredientes extra para dar más sabor o hacer las comidas más atractivas. Simplemente con el gesto de añadir más condimentos o especias a la hora de cocinar tus platos verás como notas la diferencia de una receta simple a una receta sabrosa y apetecible, pero consumiendo las mismas calorías.
Plánteate que la comida que tienes en casa es lo que vas a comer cuando te entre la ansiedad o ese gusanillo que no te deja continuar con tus tareas... Hacer la compra concienzudamente sin darte a los caprichos será clave para que cuando quieras picotear no tengas ninguna tentación y puedas hacerlo de forma saludable. La fruta y los frutos secos serán siempre los mejores aliados para estos momentos.
Cocinar siempre que podamos al horno y no abusar del aceite de oliva virgen extra en los platos es una de las premisas que deberíamos tener en cuenta como hábitos saludables en nuestras comidas. Un pequeño gesto que en tu día a día supondrá una menor cantidad de calorías ingeridas y una forma más saludable de cocción en tus comidas.
Sabemos que son un vicio y que las comidas saben mucho mejor para muchos de nosotros con una buena coca cola fresquita pero vete quitando de la cabeza el consumirlas a diario. Tomarte una bebida azucarada de vez en cuando no está mal pero debes comenzar a adquirir buenos hábitos saludables en tu alimentación y esto comienza por beber mínimo 1,5 L de agua al día.