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Haces los ejercicios necesarios para activar tus músculos abdominales, has realizado planes específicos de dieta y entrenamiento para esta zona de tu anatomía , tienes incluso una tabla específica para tonificar la zona que haces en tu propia casa, has eliminado de tu dieta diaria multitud de productos y, por último, has logrado perder peso. Pero no hay manera, la grasa sigue acumulada en tu cintura en forma de incómodo y antiestético michelín. ¿Dónde está el problema? Quizá en que aún siguen en tu dieta estos cinco enemigos del vientre plano.
Ya no tienes excusa para seguir sosteniendo tu argumento de por una copita de vino o una cervecita no pasa nada. El alcohol es un azúcar y tu cuerpo lo metaboliza como tal en el hígado y este lo metaboliza muy rápido en forma de grasas. Por lo tanto, todas las bebidas alcohólicas, si quieres reducir la grasa abdominal, están vetadas para ti.
Da igual que sean naturales o artificiales. Todos ellos alteran nuestro umbral al dulce, influyen en el microbioma intestinal de maneras que aún hoy desconocemos (pero sospechamos que no son para bien) y algunos estudios, como el realizado por el Instituto Weizmann de Ciencias (Israel), los relacionan con una mayor intolerancia a la glucosa lo que acarrea una mayor producción de insulina y se tener la insulina alta se traduce en aumentar el almacenamiento de grasa en dos zonas: barriga y caderas.
Da igual que sean naturales o artificiales. Todos ellos alteran nuestro umbral al dulce, influyen en el microbioma intestinal de maneras que aún hoy desconocemos (pero sospechamos que no son para bien) y algunos estudios, como el realizado por el Instituto Weizmann de Ciencias (Israel), los relacionan con una mayor intolerancia a la glucosa lo que acarrea una mayor producción de insulina y se tener la insulina alta se traduce en aumentar el almacenamiento de grasa en dos zonas: barriga y caderas.
Son la autopista directa para que tu cuerpo acumule grasa en la barriga. esas bebidas producen unos niveles de azúcar muy alto en tu sangre con una respuesta muy alta de insulina una situación genial para que se genere grasa. Si tienes tendencia a acumularla en la barriga, pues será el sitio al que irá directamente. Y no hablemos ya de si esos refrescos, además, tienen gas…
Por si nunca tienes claro qué tipo de alimentos están incluidos en esta lista, aquí tienes una pista: si un producto contiene más de cinco ingredientes, probablemente esté ultraprocesado. Conclusión, antes de comprar, mira las etiquetas. Se incluyen pues en ese listado las carnes procesadas (salchichas y hamburguesas), los cereales para el desayuno o las barritas de cereales, los alimentos “calentar y listo” (como las sopas instantáneas, todos los fritos y rebozados industriales, las pizzas…) y un largo etcétera que también incluye postres, helados y chocolates. El problema de estos alimentos es que no solo contienen muchas calorías sino que, además, te invitan a comer de más: de media 500 calorías más que si consumieras alimentos naturales o alimentos procesados. Y todas esas calorías de más acaban en tu cintura.
