Aprende a respirar bien: las técnicas que sirven para relajarte, para controlar el estrés (y hasta para empezar a adelgazar cuando te has estancado con la dieta)

No se trata solo de aprender cómo coger aire si haces deporte o pararse a respirar hondo antes de explotar. Todo consiste en conocer algunas técnicas de respiración y aplicarlas en tu día a día para mejorar tu salud: desde rebajar tus niveles de estrés hasta ayudarte a adelgazar. Has leído bien: respirar bien te hace perder peso.

En los últimos años se ha demostrado ampliamente que los ejercicios de respiración pueden ayudar a reducir la ansiedad y mejorar la atención y el bienestar emocional. Pero lo más nuevo es que agregar ejercicios de respiración a tu día a día te puede ayudar a perder peso y estimular la quema de grasa. Y lo primero debe ser aprender a respirar bien.

Los ejercicios de respiración son una práctica simple y al alcance de cualquiera. Y lo mejor de todo: los puedes hacer en casa, en el trabajo o incluso en el metro de camino a cualquier parte. En realidad, lo más importante es la concentración, saber aislarte y prestar una completa atención a tu respiración. Lo más importante es la concentración, aprender a aislarte y prestar una completa atención a tu respiración.

1. Respiración profunda: inhala, contén el aire unos segundos y suéltalo.

2. Respiración alternativa por la nariz: inhala y exhala a través de fosas nasales alternativamente y usando los dedos para cerrar un lado cada vez.

3. Respiración con los labios fruncidos: inhala por la nariz y exhala lentamente por una leve abertura de la boca.

4. Respiración diafragmática o abdominal: túmbate boca arriba, pon las manos en la parte superior del pecho y exhala con los labios fruncidos mientras aprietas los músculos del estómago.

5. Senobi: sentada o de pie, extiende las manos por encima de la cabeza con las palmas hacia arriba, inclínate hacia atrás, arquea el cuello y uso de la respiración abdominal.

Parece uno de esos mensajes de curandero que a menudo circulan por la red, pero es absolutamente cierto: respirar bien te ayuda a adelgazar. La ciencia ha demostrado que la práctica de ejercicios de respiración puede promover la pérdida de peso y disminuir la grasa corporal.

Por ejemplo, un estudio en 40 mujeres señaló que la práctica del Senobi es eficaz para la pérdida de peso al regular el sistema nervioso autónomo y la secreción de hormonas.

Otro trabajo mostró que practicar ejercicios de respiración durante 45 minutos al día tres veces por semana contribuye notablemente a rebajar el peso corporal y el índice de masa corporal .

Y otra cosa bien documentada: respirar bien puede disminuir las ganas de comer, algo que obviamente ayuda a quienes siguen una esforzada dieta. Al inhalar y exhalar concentradamente, aumentan los niveles de leptina, que es la hormona que regula la sensación de saciedad.

Ya se sabe que los ejercicios de respiración pueden ayudar a aliviar los sentimientos de estrés, ansiedad y depresión. Y esto se vincula directamente con engordar, pues resulta que el aumento de los niveles de la hormona del estrés, como se conoce al cortisol, se relaciona con un mayor riesgo de aumento de peso.

Por otra parte, los niveles más altos de cortisol también se asociarían a esa escena tan conocida de estar a tope de presión o melancolía y salir disparada hacia la nevera: efectivamente, la hormona del estrés dispara los antojos.

La práctica de actividades para reducir esa ansiedad, y una de las más estupendas son los ejercicios de respiración, puede ayudar a prevenir comer en exceso y promover así la pérdida de peso.

Así que ya no tienes excusa: reserva unos pocos minutos de tu día para respirar concentradamente, elige la técnica que mejor te funcione y conviértelo en rutina. Tu mente (y tu cuerpo) te lo agradecerá.