Por qué el ayuno intermitente ayuda (y mucho) a perder peso: así es como acelera el metabolismo y mejora la digestión

Es lógico que dentro de un plan dietético se busquen formas de acelerar el metabolismo porque es una de las armas más eficaces para perder peso. De hecho, hasta existe una dieta del metabolismo acelerado . Y si encima lo combinas con ejercicio , mejor que mejor. Lo cierto es que hay razones de peso, demostradas por la ciencia, para confiar en la táctica de acelerar el metabolismo dentro de cualquier plan destinado a quitarse kilos y el ayuno intermitente funciona de verdad para conseguir ese propósito.

Las primeras investigaciones sugieren que los ayunos aumentan el metabolismo hasta en un 14% en el corto plazo y varios estudios añaden que la masa muscular no disminuye mucho con el ayuno intermitente, proponiendo varias ventajas importantes para perder peso sobre las dietas basadas en la restricción calórica continua.

El ayuno intermitente es un plan de alimentación que implica periodos de restricción de alimentos, llamados ayunos, seguidos de un período de alimentación normal. Te puede ayudar a perder peso, reducir el riesgo de enfermedades y aumentar su esperanza de vida, entre otras bondades. Algunos expertos incluso afirman que sus efectos beneficiosos sobre el metabolismo lo convierten en una forma más saludable de perder peso que la restricción calórica estándar.

Lo cierto es que el ayuno intermitente es un enfoque simple y efectivo para la pérdida de grasa y es relativamente fácil de seguir. Los estudios han demostrado que cuando se trata de perder peso, el ayuno intermitente puede ser tan efectivo como la restricción calórica tradicional, e incluso más. De hecho, una revisión de 2014 ya encontró que el ayuno intermitente podía ayudar a perder hasta un impresionante 8% del peso corporal a medio plazo. Y una revisión de 2016 concluyó que en las personas con obesidad o sobrepeso, el ayuno intermitente puede ser una mejor alternativa para perder peso que las dietas muy bajas en calorías.

Hay formas diferentes de probar el ayuno intermitente. Algunas personas siguen la dieta 5:2, que consiste en ayunar 2 días a la semana. Otras practican el ayuno en días alternos o el método 16/8. Todo consiste en probar cuál se adapta mejor a cada persona y te cuesta menor seguir.

Las hormonas son sustancias químicas que actúan como mensajeros. Viajan a través de tu cuerpo para coordinar funciones complicadas, incluidos el crecimiento y el metabolismo. También juegan un papel importante en la regulación de tu peso. Esto se debe a que tienen una fuerte influencia en tu apetito, la cantidad de calorías que comes y la cantidad de grasa que almacenas o quemas. El ayuno intermitente se ha relacionado con mejoras en el equilibrio de algunas hormonas quemagrasas, lo que podría convertirlo en una herramienta útil para controlar el peso.

La insulina es una de las principales hormonas implicadas en el metabolismo de las grasas. Tener niveles crónicamente altos de insulina puede hacer que sea mucho más difícil perder peso. Los altos niveles de insulina también se han relacionado con problemas de salud como la obesidad, la diabetes tipo 2, las enfermedades cardíacas y el cáncer. Se ha demostrado que el ayuno intermitente es tan efectivo como las dietas restringidas en calorías para reducir los niveles de insulina. De hecho, este estilo de alimentación podría reducir los niveles de insulina en ayunas entre un 20 y un 31%.

Por otra parte, el ayuno puede causar un aumento en los niveles sanguíneos de la hormona del crecimiento humano, una hormona importante para promover la pérdida de grasa. Algunos estudios han demostrado que el índice de esta hormona puede aumentar hasta cinco veces durante el ayuno. Además, los aumentos en los niveles sanguíneos de la hormona del crecimiento humano no solo promueven la quema de grasa, sino que también preservan la masa muscular, entre otros beneficios.