No solo agua: del gazpacho a la sandía, cinco alimentos estupendos para la hidratación (y tu dieta)

Si tienes sed es porque comienzas a estar deshidratada, ya sea por calor, desgaste físico u otras razones. Si no lo atajas, te sentirás débil, mareada, fatigada, con boca seca o con problemas para concentrarte. Y beber agua no es la única opción. ¿Has pensado que con la comida también te puedes hidratar o prevenir la deshidratación? Y con cosas tan buenas como el gazpacho o la sandía, también geniales para tu dieta.

No es solo contar con una dosis de hidratación extra para el verano, sino que paliar el desgaste de agua del cuerpo es una necesidad durante todo el año. ¿ Por qué la hidratación es tan importante? Es energía para tu cerebro y lubricante para tus músculos. Mente y cuerpo. Y no solo es importante con el paso de los años, sino que l a hidratación es fundamental en los niños, y más en verano, cuando la mezcla de actividad y calor se vuelve tan peligrosa. La solución no es solo beber más agua, que también, sino además incorporar a tu vida una serie de alimentos con alto poder hidratante. Aquí tienes varias propuestas y valores añadidos a tu dieta.

Sandía, la fruta reina de la hidratación y estupenda para tu dieta

Las frutas y verduras tienen un alto contenido de agua y pueden ser una excelente opción para mantenerte hidratada. Esto es especialmente relevante en la sandía. Una ración de sandía cortada en cubitos contiene más de un 90% de agua. Tomarla fría te ayudará si tu deshidratación se debe al calor o al esfuerzo excesivo. Al tiempo, es un alimento genial para cualquier dieta porque tiene apenas 20 calorías por cada 100 gramos.

Gazpacho, un básico de cada verano

El gazpacho es uno de los platos más populares de España y Portugal, y especialmente en los meses de verano. Su ingrediente principal, el tomate, ocupa un lugar destacado en la lista de alimentos hidratantes. Además de tener un contenido de agua del 94%, los tomates apenas suman 33 calorías en cada ración y son ricos en potasio, importante para controlar la presión arterial y prevenir enfermedades cardíacas. Puedes tomarlo para rehidratarte, refrescarte y prevenir. Tres en uno.

Caldos y sopas para todo el año

Los caldos y las sopas aportan un alto contenido de agua y electrolitos, una combinación clave en la hidratación. Además, el caldo de huesos y otras sopas con proteína animal también proporcionan colágeno, una proteína de origen animal importante para la salud de las articulaciones. Es una forma excelente de hidratarse cuando las temperaturas son bajas y no tienes tanta sed. Las cremas y sopas frías con opciones muy veraniegas.

Leche, llena de electrolitos útiles para evitar la deshidratación

Un vaso de leche proporciona líquidos, proteínas, carbohidratos y algo de grasa. Es una excelente alternativa para huir de la deshidratación porque contiene muchos electrolitos útiles. También contiene una pequeña cantidad de sodio, por lo que puede ayudar a tu organismo a retener más líquido. Una excelente opción para hidratarte si tienes poca sed o apetito.

Batidos y zumos, comer y beber a la vez

Los batidos y los zumos son una forma completamente personalizada de obtener más líquidos cuando estás deshidratada. Todo consiste en formar una base líquida con leche o agua para después añadirle alimentos saludables como frutas o verduras. O incluso yogur para obtener más proteínas. Agrega un poco de hielo para enfriarlo aún más si sientes náuseas por el calor o el ejercicio.