Huevos camperos, el nuevo elixir de la juventud: fuente de vitaminas, omega-3 y betacaroteno

Son injustos los muchos mitos que se han creado en torno al huevo cuando la realidad es que se trata de un alimento de lo más saludable si se sabe cómo consumirlo. Pierde el miedo a las calorías del huevo y aprende cómo tomar hasta huevos fritos sanos . Y si son huevos camperos, mejor que mejor. No solo serás ECO-friendly, sino que aprovecharás muchos de sus beneficios para la salud.

Porque los huevos camperos son uno de los tipos de huevo más saludables que puedes comprar. Son más nutritivos y las gallinas que las pusieron tuvieron libre acceso al mundo exterior, con todo lo que eso significa, además de seguir una dieta más natural. Son más nutritivos que los huevos convencionales que puedes encontrar en el supermercado.

Las ventajas de los huevos camperos

En comparación con los huevos que más habitualmente se compran, los camperos son más altos en vitamina A, E y omega-3, así como más bajos en colesterol y grasas saturadas. Y pueden llegar a contener de tres a cuatro veces la cantidad de vitamina D que los huevos de gallinas criadas en interiores.

Las gallinas criadas en campo disfrutan de un amplio espacio abierto para caminar, interactuar y hasta relajarse después de un día de picotear y comer. Es una especie de estilo de vida «mimado» en comparación con las condiciones de vida de otras gallinas criadas en cautividad y con planes concretos de desarrollo.

Un estudio reciente de Mother Earth News encontró que los huevos de gallinas camperas contienen menos colesterol y grasas saturadas que los comprados habitualmente en supermercados. También hallaron que los huevos camperos contienen cantidades más altas de ácidos grasos omega-3, vitamina E y betacaroteno que los huevos típicos que se encuentran en los estantes más habituales. Estos nutrientes adicionales apoyan la salud del cerebro, protegen el corazón y ayudan a reducir el riesgo de cáncer.

Mayor densidad de nutrientes

Al comparar la densidad de nutrientes de los huevos criados comercialmente respecto a los huevos de gallinas camperas, también se encontró que éstos últimos contienen de tres a seis veces más vitamina D que los huevos comprados en tiendas. Y no es poco, conociendo el déficit general de este tipo de vitamina que tienen las sociedades modernas.

La vitamina D proviene de la exposición al sol y de fuentes alimenticias. Sin los niveles adecuados de este tipo de vitamina, aumenta el riesgo de osteoporosis, diabetes, cáncer, problemas cardíacos y otras afecciones crónicas.

Muchos lo consideran como una especie de nuevo elixir de la juventud por su acción sobre la memoria, el fortalecimiento del corazón, la prevención de la depresión, su efecto sobre la piel o la mejora del estado de tus dientes. Igual no hay que exagerar tanto, pero tampoco se puede negar su mayor valor respecto al huevo comercial, que ya de por sí tiene grandes beneficios.