No existen productos, ejercicios ni alimentos milagrosos para perder peso, pero con un poco de constancia y fuerza de voluntad, sí que existen aquellos que pueden ayudarte a conseguirlo más rápidamente. Este es el caso de las infusiones, que combinadas con una alimentación sana y la práctica regular de ejercicio, puede maximizar los efectos de una vida sana.
El té de limón, jengibre y chía, del que vamos a hablarte hoy de forma más extensa, es una de estas infusiones que, además de ser baja en calorías, ayuda a desinchar el abdomen y a reducir la retención de líquidos del organismo. Pero eso no es todo, ya que gracias a su refrescante sabor, puede ayudarte a sustituir las bebidas azucaradas que dan al traste con tu dieta.
Vamos a hablar más detalladamente de esta infusión:
Para entender qué es lo que puede hacer por ti el consumo de esta infusión, es necesario conocer los efectos de sus tres ingredientes principales. Tres alimentos con potentes beneficios para nuestro organismo si los consumes en solitario pero que se multiplican al unirlos en una infusión.
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El limon tiene unas potentes propiedades antioxidantes porque contiene vitamina C, ácidos orgánicos y flavonoides. Todo esto lo convierten en el alimento ideal en cualquier dieta de adelgazamiento, ya que acelera la quema de grasas y ayuda a digerir los alimentos. Además es una fruta muy versatil, ya que puedes aprovechar tanto la pulpa como la piel.
Una de las principales virtudes del jengibre para una dieta de adelgazamiento es su virtud para acelerar el metabolismo, lo que ayuda a quemar grasa y calorías. Pero es que además esta especia regula los niveles de glucosa y colesterol en la sangre y nos permite controlar el apetito de manera natural.
Las semillas de chía nos ayudan a reducir la hinchazón abdominal al favorecer el tránsito intestinal, por lo que se convierten en el complemento ideal para las personas que sufren estreñimiento. Además, tienen muchas otras propiedades beneficiosas, gracias a su poder antioxidante y alto porcentaje en proteína y fibra. Para que produzcan estos efectos sobre el organismo deberemos dejarlas siempre en remojo durante unas cuantas horas antes de consumirlas.
Té de jengibre, limón y chía. /
1 limón
2 vasos de agua (500 ml)
3 cucharaditas de semillas de chía
2,5 gr de jengibre fresco rallado o en polvo
Miel, estevia, eritritol... cualquier endulzante bajo en calorías (opcional)
Pon la noche anterior las semillas de chía en remojo en los dos vasos de agua.
A la mañana siguiente, bate las semillas y el agua junto con el zumo del limón y el jengibre.
Para multiplicar los efectos beneficiosos puedes rallar un poco de la peladura del limón, que es más rica en nutrientes que la pulpa.
Puedes añadir un toque de edulcorante, pero no es necesario.
Esta bebida es apta para tomar en cualquier momento del día y sus efectos serán muy beneficiosos pero si lo haces por la noche, éstos se multiplicarán. ¿Y eso por qué? Porque mientras duermes, el cuerpo es capaz de repararse de forma mucho más efectiva que durante el día, cuando debe atender a otras funciones que requieren energía.
Así es como el cuerpo se aprovecha del efecto acelerador del metabolismo que le aporta el jengibre, quemando más grasas y calorías mientras estás durmiendo. Esa es la razón por la que tomar infusiones adelgazantes antes de ir a la cama hará que bajes de peso más rápidamente que si lo haces en otro momento del día.