Conocí a Marta Auyanet grabando un reportaje en 'La jefa'. El local ya hacía tiempo que me había enamorado con su decoración, el idilio continuó cuando probé su cocina, y cuando supe que aquel ambiente colonial en pleno barrio de Salamanca de Madrid era 'culpa suya', entendí todo. Por eso, no he podido evitar ponerme (poneros) en manos de esta arquitecta de interiores y diseñadora para conocer qué secretos de decoración podían crear un rincón tan mágico como aquel.
Apostar siempre por colores cálidos de la gama de los beige o los grises para paredes y techos, ya que mezclados con materiales nobles como la madera y la piedra aportan armonía y tranquilidad.
Los papeles pintados están a la última, y los modelos coloridos y con motivos vegetales son perfectos para añadir profundidad y vida a la estancia. Si añadimos flores y plantas naturales (los cáctus están de moda), mejor que mejor.
Las grandes lámparas y los jarrones imponentes son siempre un acierto, pero por el contrado es mejor huír de la acumulación de pequeñas piezas.
No olvides de la iluminación, y juega con las luces indirectas que aportan las lámparas de mesa o de pie, por ejemplo, ya que ayudan a generar un ambiente cálido e íntimo.
Las alfombras (en el suelo o en las paredes) siempre son un plus si las mezclas con un bonito sofá, una manta confortable y unas grandes cortinas que arrastren por el suelo.
Si la casa no es muy grande (y si lo es, ¡también!) juega con los espejos para multiplicar los espacios.
Esta temporada supone la vuelta del dorado, los brillos y los destellos. El oro se introduce en nuestras casas en forma de lámparas, jarrones, mesas, vajillas y demás complementos, así como los acabados en mármol y los detalles que simulan piedras preciosas.
También se impone la geometría en los suelos, y pasamos de las piezas rectangulares o cuadradas a los hexágonos, creando mosaicos que se convierten en obras de arte al mezclar colores que forman increíbles dibujos.
En cuanto a los textiles, apuesta por el color y no tengas miedo a introducir tonos que nos trasladan a un verano perpetuo, como los amarillos y azules; así como materiales 'rustic chic' como la rafia o el esparto.
Y por último, haceros con una vajilla bonita, como las de Azarraluqui o las de Guille García-Hoz.
20 de enero-18 de febrero
Con el Aire como elemento, los Acuario son independientes, graciosos, muy sociables e imaginativos, Ocultan un punto de excentricidad que no se ve a simple vista y, si te despistas, te verás inmerso en alguno des sus desafíos mentales. Pero su rebeldía y su impaciencia juega muchas veces en su contra. Ver más
¿Qué me deparan los astros?