Elegir el estilo de decoración para tu hogar es uno de los primeros pasos antes de ponerte a ello. Porque si no sabes qué tipo de decoración quieres, ¿cómo vas a elegir muebles u otras piezas para combinarlas con gusto y estilo? Para ello puedes informarte sobre los diferentes estilos para ver cual va mejor con tu personalidad. ¿Un toque ecléctico, como los parisinos? ¿Algo minimalista, como los suecos? ¿O prefieres algo que transmita calma, como el estilo 'slow design'? Decidir esto es algo muy importante, así que tómate tu tiempo. Para que tengas más opciones, hoy vamos a hablarte de otra forma de decorar tu casa, el estilo nómada. Se trata de aportar un toque fresco y bohemio a tu hogar a través de piezas funcionales y elaboradas con materiales naturales, que de la sensación de que te encuentras en Ibiza en temporada baja.
El estilo nómada es una forma de decoración muy ligera, y fresca que busca, sobre todo, piezas que siempre sean funcionales. Las personas que optan por un estilo nómada en casa, suelen viajar mucho y cambiarse con frecuencia de casa, por lo que es fácil encontrar en ellas recuerdos de todos sus viajes por diferentes lugares del mundo. El estilo nómada tiene muchos puntos en común con el estilo boho, encontrándonos en su decoración muchos flecos, grandes alfombras y materiales de fibras naturales. Los expertos de Westwing nos lo explican con más detalle:
El estilo nómada se caracteriza por una amplia variedad de colores, pero siempre basándonos en el tono neutro de los muebles principales. Como te hemos comentado en más de una ocasión, si eliges un sofá (por ejemplo) en colores neutros, es más fácil combinarlo con cojines, cuadros y otras piezas más pequeñas en colores más llamativos sin que se sature el conjunto. También puedes mezclar estampados diferentes en textiles, e incluso optar por utilizar papel pintado en una de las paredes.
Ya hemos comentado que las personas que escogen este tipo de decoración para su hogar suelen ser amantes de los viajes, por lo que es fácil que, a lo largo de los años, se hayan hecho con una gran cantidad de recuerdos de cada uno de ellos. Por eso se suelen ver en estas casas piezas únicas repartidas por los diferentes rincones o las estanterías. Añaden un toque especial y, sobre todo muy personal a tu hogar.
Al igual que en el estilo boho, el nómada se decanta por la mexcla de e stampados y colores. Desde fundas de sofá hasta alfombras de estilo étnico o lámparas de inspiración marroquí. Piezas únicas y diferentes que centran la atención del conjunto. Eso sí, tienes que tener cuidado de no sobrecargarlo.
Esto es consecuencia de los numerosos viajes de las personas que habitan estos hogares. ¿Quién no se ha venido de un viaje con una máscara de madera tribal, una figura del mismo material o un tapiz de múltiples colores para colgar en la pared? Todos estos detalles multiculturales le aportan un toque único a tu hogar.
La clave para acertar es elegir elementos decorativos que sean llamativos y que sean de inspiración étnica, como los elementos ratán, que se suelen combinar muy bien con este estilo de decoración.
Como ya te hemos comentado, a las personas que optan por este tipo de decoración les gustan los cambios, no tener un hogar fijo e ir dando tumbos de aquí para allá. Por eso es normal encontrarnos con muebles funcionales y fáciles de transportar en una mudanza.
Alfombras con estampados étnicos incluso superpuestas entre sí, multitud de cojines con diseños de diferentes formas, tamaños, puffs mullidos... cualquier cosa vale siempre que tenga unos colores brillantes o un estampado tribal y que puedas combinar con tus muebles mas pesados de tonos neutros.
Madera, cuero, fibras vegetales, textiles de algodón, plantas, detalles de cristal, cerámica... esto es otra de las características que comparte con el estilo boho chic, donde no puede faltar lo natural. Salpica la decoración con elementos de la naturaleza y propuestas DIY para crear una atmósfera acogedora.
Como ves, el hecho de cambiar de casa (o incluso de continente) de manera habitual no significa que tengas que vivir con lo puesto y tu casa parezca una habitación de hotel. Adaptar tu decoración a tu personalidad es un reto que puede salir muy bien si te dejas fluir.