'Half-painted' o cómo la tendencia de pintar la pared a la mitad regresa

En decoración, como en moda, todo regresa. Una de las tendencias de decoración que se vuelve a invadir algunas zonas de la casa, es el 'half-painted', o lo que es lo mismo, pintar la pared por la mitad.

Esta tendencia tuve su máximo esplendor hace dos años, y ahora parece que comenzamos a verla con buenos ojos de nuevo. Si nunca habías escuchado hablar del 'half-painted', presta atención, porque puede que se cuele en algunas zonas de tu casa.

Las zonas del recibidor son espacios donde podemos innovar. Aunque siempre debemos optar por muebles funcionales, y detalles decorativos que sean prácticos. Esto es debido a que el recibidor suele ser una zona muy estrecha y de tránsito de la casa.

Para que tengamos mayor profundidad, y si estamos cansados del clásico color blanco, podemos optar por pintar la pared a la mitad como en esta imagen. La mitad superior de la pared la mantenemos en color blanco, y la otra en azul. Es en lo que se basa la técnica del 'half painted', casi a modo de arrimadero pero con pintura.

No hace falta que dividamos la pared a partes totalmente iguales. Podemos hacer una técnica algo más original como la que se aprecia en al siguiente foto. De esta forma, no se verá la típica raya recta en la pared, sino más bien, un difuminado. Le dará un toque más natural, y «casi improvisado» a la pared de cualquier zona de la casa.

El 'half-painted' es una buena técnica para generar algo de contraste en algunas zonas de la vivienda. Si, por ejemplo, contamos con un salón en colores muy claros, y queremos darle un toque de color, pero sin perder armonía, podemos hacer como en este salón. Un salón en color blanco, y pintado a la mitad con un toque grisáceo muy sutil. El resto de accesorios que se sitúan en la pared gris, también son de este color, lo que hace el efecto de camuflaje.

Otra técnica para usar 'half-painted' es pintar las paredes, justo hasta donde están situados los cuadros. Así se notará menos la división y creará mayor amplitud a cualquier zona, como por ejemplo ocurre con este dormitorio.

Podemos hacer como en el dormitorio y pintar la pared justo a la altura de los cuadros, o por encima, justo como en esta cocina con un tono verde bastante llamativo. Pintando la pared de esta forma, conseguimos un efecto arrimadero, pero sin añadir ningún tipo de madera, yeso, o papel pintado.