¿Qué es la calistenia y cómo te puede ayudar a estar en forma?

Vas al gimnasio y te subes automáticamente a la cinta o a la elíptica. Después te enganchas al remo, sigues con unas flexiones de bíceps y terminas con unas aperturas laterales de piernas en máquina... ¿Te suena la imagen?

Pues bien, no es que estés haciendo nada mal, pero si de verdad quieres progresar en tu entrenamiento hay una palabra mágica: calistenia.

¿Y qué es eso de la calistenia? Acostumbrados como estamos a complicarlo todo en estos tiempos, no conviene olvidar algunas viejas costumbres. La calistenia es el ejercicio más puro (y antiguo) que existe: usar el peso de tu cuerpo y la fuerza de la gravedad para ponerte en forma.

Calistenia viene de la unión de dos palabras griegas: 'kallos' (belleza) y 'sthenos' (fortaleza). Hay que tener en cuenta que, en la Antigua Grecia, no existían las máquinas tal y como hoy en día las encuentras en tu 'gym'.

Así que el entrenamiento se realizaba de la manera más natural (bella) posible. Los atletas se entrenaban aprovechando la resistencia (fuerza) que ejerce la fuerza de la gravedad sobre sus cuerpos.

Crunch de abdominales, sentadillas , flexiones de brazos, 'burpees', zancadas , elevaciones de piernas, dominadas, fondos, planchas... Cualquier ejercicio que se hace utilizando 'solo' tu cuerpo es calisténico.

La única 'excepción' se produce si usas un punto de apoyo (una barra, una silla...). Si utilizas un aparato (máquina de remo, poleas...) o sostienes un elemento (mancuernas, kettlebells, barras...), ya no es calistenia.

Y aquí viene la sencillez (y la dificultad) de hacer ejercicios calisténicos. Los puedes hacer casi en cualquier lugar... Pero claro, no es lo mismo levantar unas mancuernas de un kilo que hacer flexiones con tus brazos y sostener con ellos el peso de tu cuerpo.

Con todo, hay 'trucos' para reducir la dificultad. Por ejemplo, en las flexiones de brazos, cuanto más levantados estén estos con respecto a tus piernas, te costará menos realizarlas. Para dominar la técnica, por ejemplo, puedes probar a hacerlas de pie contra una pared.

Lo bueno de la calistenia es que aprovecha el movimiento natural del cuerpo, mueve grandes grupos musculares y te permiten ganar fuerza y flexibilidad al mismo tiempo.

...Y es que ya lo dijo Arquímedes: "dadme un punto de apoyo y moveré el mundo".