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No se conoce a la proteína como uno de "los componentes básicos de la vida" por nada. Este macronutriente constituye el componente principal de todas nuestras células y proporciona los aminoácidos esenciales que mantienen a nuestro cuerpo en funcionamiento. El problema es que algunos de nosotros a veces no la consumimos tanto como deberíamos.
Y es que a la hora de consumir proteína no toda es igual. Por ejemplo, una taza de leche de vaca tiene aproximadamente 8,5 gramos de proteína, mientras que una taza de leche de almendras solo contiene 1 gramo. "Tenemos todos estos nuevos alimentos de origen vegetal en el mercado, pero [en términos de proteínas], no todos son iguales", explica a Health la nutricionista Leslie Bonci.
Además, la mayoría de las proteínas de origen vegetal no son proteínas completas, lo que significa que carecen de al menos uno de los nueve aminoácidos esenciales que se pueden encontrar en alimentos de origen animal como la carne, los mariscos y los huevos. (La soja y la quinoa son proteínas completas; los alubias, guisantes, granos, nueces y semillas no lo son).
Según el Departamento de Agricultura de los Estados Unidos en la actualidad, tanto hombres como mujeres comen aproximadamente 0.8 gramos de proteína por cada kilogramo de peso corporal, pero Bonci dice que si realiza entrenamiento de fuerza o hace ejercicio con regularidad es posible que necesites un poco más. (Una adulto que pesa 68 kilos necesitaría 54 gramos de proteína.
Y no solo se trata de conocer sus beneficios, también se debe aprender a saber en qué momento consumirlo. "El cuerpo está más sano cuando obtiene algo de proteína cada cuatro o cinco horas", dice Bonci.
Estos son los 5 signos que te dicen que no estás consumiendo de tanta proteína como deberías.
1. Eres propenso a las fracturas
Tus huesos necesitan más que solo una dosis saludable de calcio, también necesitan suficiente proteína. Un estudio realizado en 2018 por la Fundación internacional de Osteoporosis encontró que comer una dieta rica en proteínas puede ayudar a proteger sus huesos.
Cuando no estamos obteniendo suficiente proteína para alimentar nuestros órganos y cerebro, nuestro cuerpo toman prestado de otras áreas, incluidos los almacenamientos en nuestro tejido muscular. Sin el soporte del tejido muscular nuestros huesos son más susceptibles a lesiones como fracturas y roturas.
2. Tu cabello y uñas lucen quebradizos
Debido a que la proteína es una parte esencial de tu cabello y uñas, tus uñas pueden sentirse más suaves y el cabello puede volverse más frágil con el tiempo. "El cabello puede perder algo de su brillo, y puede que no sea tan grueso como solía ser".
Según la Academia Americana de Dermatología después de unos meses de no comer suficiente proteína, también puedes experimentar algo de pérdida de cabello. Esto se debe en parte porque el cuerpo detiene el crecimiento del cabello para preservar sus reservas de proteínas.
3. Estás perdiendo peso de tus músculos
Normalmente, si las personas no obtienen suficiente proteína, sus cuerpos descompondrán los músculos para obtener más y por lo tanto se pierde masa muscular.
4. Te sientes débil
Probablemente no te sentirá fatigado de inmediato, pero con el tiempo, las personas que no comen suficientes proteínas pueden sentirse más cansadas o perezosas de lo normal. La proteína es un componente de la hemoglobina, que está presente en nuestra en nuestros glóbulos rojos y transporta oxígeno a todo el cuerpo. Y los niveles demasiado bajos de oxígeno pueden causar debilidad o falta de aliento.
5. Siempre estás resfriado
La proteína es uno de los componentes básicos de los anticuerpos, producidos por el sistema inmunológico del cuerpo para ayudar a combatir a los invasores extraños como las bacterias y los virus. Así que si no tienes suficiente proteína, podrías tener un sistema inmunológico susceptible a pillar enfermedades.
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