Por fin has decidido que vas a tomarte el ejercicio en serio, un preparador físico puede ser el empujón que necesitas para ponerte en forma. Una ayuda especialmente necesaria en tres casos: “Cuando eres una persona sedentaria y quieres iniciar una actividad física regular; si lo que buscas es mejorar tu rendimiento de cara a una competición o como receta deportiva, es decir, por prescripción médica”, enumera José Miguel del Castillo, asesor del Consejo General de la Educación Física y Deportiva.
Pongamos que estás en el primero de los supuestos o que eres una de esas personas intermitentes en lo que al ejercicio se refiere. En esas circunstancias, es indispensable el one to one. “Su gran aportación será ayudarte a construir un hábito deportivo. Y sin eso nunca obtendrás resultados, hagas el entrenamiento que hagas”, sentencia Martín Giacchetta, fundador de Boutique Gym.
Evita darte detalles sobre su formación o enseñarte su titulación oficial.
Se niega a tener una entrevista inicial o a dar una clase práctica de prueba.
Tiene un precio sospechosamente bajo (la horquilla dependiendo de su experiencia y de la localidad donde trabaje está entre 35 y 70 € por hora de entrenamiento).
Presenta un material deportivo deficiente, en malas condiciones o de baja calidad.
Prescribe tu alimentación (eso solo puede hacerlo un nutricionista).
Ahora toca saber cómo y dónde elegir a un personal trainer. Para empezar, asegúrate de que es un verdadero profesional, porque en este sector el intrusismomo es elevado. Mucho cuidado porque según diversos estudios, hasta un 40% de las personas que ejercen esta disciplina carece de la cualificación necesaria.
La garantía, como en casi todo, te la va a dar la titulación y la experiencia. Lo suyo, es que tu entrenador sea licenciado en Ciencias de la Actividad Física y del Deporte y que disponga de la especialización pertinente, así que antes de llegar a un acuerdo, pídele los papeles.
El siguiente consejo es ponerte en guardia ante los “musculitos” que se anuncian por internet. “ Llevar la camiseta ceñida y marcar tableta no convierte a nadie en preparador físico. El 80% de la gente que contrata a un entrenador quiere perder peso, y eso se puede conseguir con una buena praxis o mala. Si no tienen los conocimientos de anatomía, biomecánica, fisiología, etc, se puede provocar una rabdomiolisis o algo peor”, señala José Miguel del Castillo. La recomendación es acudir a los colegios oficiales de educadores físico-deportivos para buscar a un profesional, porque eso te va a garantizar que sigue un código deontológico y que cuenta con un seguro de responsabilidad civil.
Si ya tienes un nombre, aún te queda un paso más: comprobar si te gusta su método. Un buen personal trainer debería invertir en conocerte a fondo, por lo que tendría que pasarte un cuestionario con todo tipo de preguntas acerca de tu estado físico, tu salud, tu alimentación, etc. En base a toda esa información y a la meta que te plantees, diseñará una rutina de trabajo customizada. “Con eso, si se tiene fuerza de voluntad, lo suyo es entrenar dos o tres días y el resto de la semana hacer un seguimiento semipresencial”, afirma Del Castillo. Giacchetta da un paso más: “Un buen entrenador, además de conocer las herramientas propias de su trabajo y estar actualizado, debe tener empatía. A veces una persona puede tener un mal día y has de saber detectarlo y ser flexible”.
Te hará un entrenamiento a medida, solo para ti.
Te ayudará a conseguir tus objetivos de manera realista (pérdida de peso, preparación para una maratón, tonificación...).
Minimiza las posibilidades de que te lesiones al hacer ejercicio.
Optimizará tu tiempo y favorecerá un entrenamiento eficiente.
Incrementará tu motivación a la hora de hacer ejercicio.
Ayudará a generar adhesión al deporte, lo que redundará en tu salud y en tu físico.
¿Y hasta cuándo mantener esta ayuda extra? “Yo tengo alumnos desde hace ocho años y otros que quieren algo puntual y ya está. El entrenamiento perfecto es el que mata al sedentarismo y genera un vínculo con el ejercicio y con el entrenador”, puntualiza Giacchetta, que trabaja en la implantación de un novedoso concepto, el multitrainer, que consiste en que el cliente pueda combinar distintos especialistas a lo largo de la semana para maximizar los resultados. El colmo de la personalización deportiva.
20 de enero-18 de febrero
Con el Aire como elemento, los Acuario son independientes, graciosos, muy sociables e imaginativos, Ocultan un punto de excentricidad que no se ve a simple vista y, si te despistas, te verás inmerso en alguno des sus desafíos mentales. Pero su rebeldía y su impaciencia juega muchas veces en su contra. Ver más
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