Sarvangasana (o postura de la vela): la reina de las poses invertidas de yoga que te ayudará a evitar tiroides y varices

El yoga te ayuda a ser más consciente de tu mente y cuerpo. Para lograr esto se utilizan posiciones físicas, meditación y ejercicios de respiración. Sarvangasana, también conocida como postura de la vela, es una pose en la que todo el cuerpo se equilibra sobre los hombros. Entre otros muchos beneficios, te va a ayudar a prevenir y tratar problemas de tiroides y varices.

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Tamara Vila
Tamara Vila

No lo duces: las varices son más que un problema estético . Existen muchos consejos para evitar varices , pero probablemente nunca te hayan hablado del yoga. Si practicas Sarvangasana, o pose de la vela, podrás lucir piernas sexys y sin varices . Todo el cuerpo está involucrado en esta asana: te acuestas boca arriba y estableces un ángulo de 90 grados con las piernas. Luego, utilizando las manos como apoyo, l evantas las caderas del suelo y equilibras todo el cuerpo sobre los hombros. Y también funciona para la tiroides.

Sarvangasana es un ejercicio de cuerpo completo que trabaja en varios grupos musculares y lo ayuda a lograr equilibrio, una mejor postura y serenidad de varias maneras. También conocida como la ' Reina de las asanas', es una pose extremadamente buena tanto para la salud física como mental.

Cómo hacer bien Sarvangasana

Lo primero que tienes que hacer es acostarte boca arriba sobre la esterilla con los pies juntos y las manos al lado del torso. Mantén tu mente calmada y el cuerpo relajado. Inhala y exhala profundamente mientras acercas los pies a las caderas y doblas las piernas contra los muslos mientras exhalas.

Con un suave tirón de los músculos abdominales y el apoyo de las manos, eleva verticalmente la parte inferior del cuerpo con los dedos bajo de las caderas y los pulgares arriba. Las palmas de las manos, los codos, el cuello y la parte posterior de la cabeza deben soportar todo el peso del cuerpo en la posición final. Exhala mientras completas las acciones anteriores en cuatro o cinco segundos.

Mantén esta postura durante el tiempo que desees mientras te sientas cómoda, aunque procura no pasar de los dos minutos, mientras respiras lenta, rítmica y naturalmente. Regresa a la posición inicial inhalando y baja suavemente las caderas hacia la esterilla ayudándote de las manos. Finalmente, tómate un tiempo para realizar varias respiraciones profundas antes de relajarte y volver a respirar normalmente.

Precauciones que debes tomar al hacer la pose de la vela

Todas las posturas con la cabeza baja deben abordarse con precaución para evitar tensiones o sacudidas. La duración del ejercicio debe limitarse a un mínimo de 20 segundos al principio y un máximo de 5 minutos. También es una buena idea probar esta posición por etapas y solo terminar la postura después de unas pocas semanas de práctica.

Nunca hagas esta postura después de realizar cualquier tipo de gimnasia extenuante, ya que el flujo anómalo de sangre al cerebro en este punto podría causar algún daño. Hacerlo sin un guía y con prisas puede ejercer una presión innecesaria sobre el corazón, los órganos respiratorios y el cerebro, lo que puede provocar mareos o molestias, así como una expansión de los vasos sanguíneos de la cabeza. La hipertensión, las enfermedades cardíacas, el embarazo, las enfermedades respiratorias, la miopía excesiva, el glaucoma y el desprendimiento de retina son contraindicaciones.

Beneficios para la salud de Sarvangasana

Las venas varicosas son agrandamientos, hinchazones y torsiones de las venas que generalmente afectan las piernas. Hay un flujo reflejo de sangre a través de las venas de las piernas, lo que hace que la circulación sanguínea sea inestable. Las posturas de yoga invertidas ayudan a eliminar la sangre lenta de las venas. Además, las venas se alimentan de sangre fresca. Como resultado, el ejercicio de soporte de hombro constante ayuda en el tratamiento de las venas varicosas.

Por otra parte, los desequilibrios hormonales causan trastornos de la tiroides como el hipertiroidismo y el hipotiroidismo. Apoyar los hombros mejora la función tiroidea al restaurar el flujo sanguíneo al área. Como resultado, la salud de la tiroides mejora. La hormona tiroidea es necesaria para el crecimiento y el desarrollo cognitivo de los niños pequeños. Es más significativo en términos de metabolismo. Como resultado, la salud de la tiroides dicta la salud general del cuerpo. Esta postura mejora la salud general cuando se practica a diario. Además, con una práctica constante, se pueden evitar trastornos de la salud como el bocio, la tiroiditis, la enfermedad de Graves, el nódulo tiroideo, la tormenta tiroidea, el hipertiroidismo, el hipotiroidismo e incluso el cáncer de tiroides.

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