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Una cocina capaz de fusionar Perú, Japón y Asturias podría parecer una locura, pero es una grata sorpresa, y más si la mezcla de sabores en cada plato resulta tan exquisita.
Detrás de esta novedosa apuesta se encuentra Mario Céspedes, un cocinero que nació en Lima y que cuenta con una amplia trayectoria entre los fogones, y su mujer, Conchi Álvarez. Juntos abrieron Ronda 14 en Avilés (Asturias) y cuatro años después en Madrid.
Ubicado en la céntrica calle del General Oraá de la capital, se ha convertido en esos sitios donde la comida es diversión y placer, una verdadera experiencia hecha para compartir. Por un precio medio de 25 euros, se pueden encontrar deliciosos platos como las gyozas criollas con manitas de cerdo, el niguiri de hamburguesa de wagyu con rocoto y quesos azules asturianos o el ceviche de xarda y rabas rebozadas
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