Cómo hacer el tradicional vino caliente especiado de Navidad

Beber vino caliente o Glühwien en las fiestas navideñas no solo es tradicional de Alemania, también es típico en Noruega, Suecia o Dinamarca donde lo llaman Glögg, además de en Francia, Polonia, Reino Unido… la mayor parte del norte de Europa es una enamorada de esta reconfortante bebida. Si quieres disfrutar de ella o sorprender a tus invitados con esta tradicional receta navideña, te enseñamos a prepararla ¡es facilísima!

En los mercadillos alemanes lo más habitual es encontrarse con puestos que ofrecen a los visitantes Glühwein (vino caliente) para mantener el cuerpo a buena temperatura y soportar mejor el frío de la zona. El glögg, o vino caliente escandinavo, se sirve con almendras peladas y pasas y se suele tomar con pan de jengibre. Solo de pensarlo huele a Navidad ¿verdad?

El vino que se suele utilizar en la receta es el tinto aunque en países como Italia o Austria utilizan vino blanco. Los ingredientes que se le añaden son especias como canela, clavos de olor o anís estrellado, depende de la zona donde se elabore.

Lo bueno de esta receta es que no es estricta, se puede variar al gusto añadiendo más o menos especias y modular su dulzura, incluso se puede añadir algún licor en la receta para darle un toque diferente a la bebida.

Elaboración: Pon todos los ingredientes en un cazo a fuego medio menos el vino para que comiencen a soltar aceites y aromas las especias. Cubre los ingredientes con un poco de vino y dale vueltas con una cuchara de madera hasta que se disuelva el azúcar o endulzarte que hayas elegido. Comprueba si necesita más dulzor y añade un poquito más si fuera necesario. Añade el resto del vino y deja el cazo al fuego durante unos 30 minutos a fuego lento sin que llegue a hervir en ningún momento. Pasado ese tiempo cuela la mezcla para desechar las especias y guárdalo en una botella o jarra de cristal. Sírvelo acompañado de dulces navideños, galletas de jengibre o panettone. ¡Delicioso!