No hay Navidad sin roscón de Reyes, y esto es un hecho. Porque más allá de mariscos y asados, de uvas de Nochevieja, turrones , mazapanes y panettones , las Fiestas navideñas saben a masa esponjosa, a flor de azahar, a ralladura de naranja, a láminas de almendra, a fruta escarchada y, para muchos también, a nata o trufa. Sí, a roscón de Reyes, en definitiva, un dulce típico que en su origen era una torta de miel, higos, dátiles y frutos secos con el que se celebraba la festividad pagana de 'las Saturnales' (sobre el s.II a.C.), y que adoptó el cristianismo cuando esta religión se impuso en el Imperio Romano. Nosotras no somos nadie para abandonar tradiciones tan arraigadas (y deliciosas) , así que después de probar los mejores de Madrid (y hacernos expertas rosconeras) hemos decidido, también, buscar los más deliciosos del resto de España. No os preocupéis, que en enero nos apuntamos todas al gimnasio para quemar los excesos...
Sí, lo confesamos, somos fans del roscón de Reyes (de hecho, no entendemos por qué solo se come en Navidad) así que hace años que nos propusimos probar todos los de Madrid hasta encontrar el mejor. Y claro, con una oferta tan imponente, es imposible elegir solo uno.
Porque nos podemos faltar a nuestra cita anual con los roscones de 'toda la vida' de La Duquesita (donde los prepara Oriol Balaguer en la Calle Fernado VI, 2), La Mallorquina (Puerta del sol, 8), o Mallorca (tienen más de 10 locales en Madrid), sitios típicos de la capital que siempre son un acierto.
Pero tampoco podemos resistirnos a las propuestas de Levaduramadre (y sus roscones individuales, que encontrarás en sus más de 60 tiendas), Crustó (cuatro locales en Madrid y uno en Barcelona), Leon The Baker (y sus roscones 'gluten free'), La Magdalena de Proust (con obradores en Batalla del Salado, la Calle Pelayo y Bravo Murillo), Madreamiga (en Montecarmelo, Tetuán y el Mercado de San Miguel) o Pandelirio (en Bravo Murillo, 21; Profesor Waksman, 8, calle Naranjo, 5 y el Gourmet Experience de El Corte Inglés de Castellana).
La 'guerra' entre los que prefieren el roscón con nata o sin ella (luego están los que prefieren la trufa, la yema, el chocolate...) es tan encarnizada como la que libran los 'concebillistas' y los 'sincebollistas' en la tortilla de patata. Pero seas del bando que seas, en Barcelona podrás encontrar roscones deliciosos para todos los gustos. Por un lado está Oriol Balaguer, del que ya hemos hablado más arriba porque se encarga también de los deliciosos roscones de La Duquesita, en Madrid, pero no puedes dejar de probar en L'Atelier Barcelona (carrer Viladomat, 140 bis), además de sus cinco tipos de roscones, su famosa variedad Galette de Rois, una pasta de hojaldre con crema de avellanas y manzanas Tatin; en la Colmena (Plaça de l'Àngel, 12), no te puedes perder el de mazapán y fruta escarchada; y en el Forn La Cantonada (Carrer del Dos de Maig, 314) puedes, incluso, asistir a un taller para aprender a hacerlos tú misma.
Según nos cuentan desde La bodega de los Secretos (Calle de San Blas, 4, Madrid), la receta original del roscón de Reyes no llevaba fruta escarchada, se trataba de un bollo seco espolvoreado con azúcar y el uso de la nata no se popularizó hasta la década de los 60 del pasado siglo. Sin embargo, aunque ahora es el relleno favorito de los españoles, encontramos un sinfín de variedades, como el impresionante roscón de hojadre, crema y Nutella de Buenabuelo, en Sevilla (tienen seis locales en la ciudad). Si prefieres la receta original, tienes que probar el de la confitería Flory en A Coruña, con más de cincuenta años de tradición 'rosconera' y larguísimas colas a su puerta (en la calle Francisco Añón con Villa de Negreira) cada año la madrugada del 5 al 6 de enero; o la de La rosa de Jericó (Carrer d'Hernán Cortés, 14), una de las pastelerías más icónicas de Valencia, con más de 130 años de historia.
20 de enero-18 de febrero
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