Cómo saber si los juguetes son seguros

En esas fechas en las que los niños reciben numerosos regalos es imprescindible prestar atención a la seguridad de los pequeños de la casa y recordar qué debemos tener en cuenta para garantizar que los niños jueguen tan felices como seguros.

Pero... ¿qué es un juguete seguro.? La iniciativa Juguete Seguro respaldada por Abacus Cooperativa , lo define como aquel que no pone en peligro la seguridad y la salud de los niños, cumple la normativa e informa eficazmente de los aspectos de uso, a la vez que responde a las expectativas de juego en su sentido lúdico y educativo, ya que, en otro caso, sería seguro, pero, claro, no sería un juguete.

Las recomendaciones generales se basan en cuatro pilares: material y diseño, etiquetado, edad y valores. Es importante comprobar los materiales del juguete y observar que el etiquetado sea correcto y cumpla la normativa vigente en materia de seguridad tanto en el ámbito español como europeo. El material y el diseño determinan, además de la belleza, la durabilidad del juguete. Todos los materiales seguros son aceptables, si bien, siempre hay que atender a las recomendaciones de edad para que los niños puedan disfrutar en plenitud de sus juguetes.

Los juguetes son para disfrutar, pero también hay que atender a los valores que trasmiten y procurar evitar tópicos sexistas basados en estereotipos. Los juguetes pueden favorecer el desarrollo de los niños proponiendo actividades que favorezcan la adquisición de competencias físicas, intelectuales, afectivas o comunicativas. En todo caso, para que sea realmente efectivo, los pequeños deben disfrutar ya que es el mejor modo de aprender, jugando y aprovechando su fabulosa capacidad de sorpresa y su insaciable curiosidad.

Para que todo esto se cumpla, reiteramos la importancia de que el juguete este adaptado a la edad del menor, que viene recomendada en el embalaje de los juguetes. Sin embargo, se trata de una edad orientativa. Para acertar al cien por cien hay que atender a la madurez y a los intereses del niño.

En el caso de los más pequeños, cobran especial importancia la adecuación de los materiales para poder ser manipulados por sus pequeñas e inexpertas manos y la exclusión completa de las piezas pequeñas para evitar los posibles ahogos, dado que los niños reconocen los objetos llevándoselos a la boca.

Para terminar, además de buscar fabricantes y distribuidores de confianza, de comprobar el etiquetado de los juguetes y observar la edad recomendada hay que mantener una supervisión adecuada y proporcional a su edad, sus capacidades, el comportamiento del propio niño y el lugar en el que se desarrolla el juego.