vivir
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¿Qué me pongo? Si esta es una pregunta habitual cada día parece aún más difícil de responder durante el embarazo, cuando la ropa comienza a quedar pequeña por días pero todavía la barriga no es suficientemente grande como para que te quede bien la ropa premamá y cuando repites una mil veces el mismo conjunto porque no quieres dejarte un capital en ropa para unos meses.
Habla con tus amigas: La amigas son siempre las mejores aliadas. No dudes en pedirles la ropa que ellas utilizaron durante sus embarazos. Mucha ropa apenas se ha utilizado durante 3 o 4 meses y está nueva. Además, seguro que a ellas les haces un favor dejándoles espacio en sus armarios.
Complementos a gogó: Lo mejor para no cansarte de llevar la misma ropa durante varios meses es apostar por los básicos, faldas, pantalones y vestidos de colores para después adaptarlos a cada ocasión con complementos. Aprovecha para darte caprichos de bolsos, pañuelos, collares o cinturones de colores que den un aire nuevo a cada conjunto. Un pantalón vaquero y una camiseta blanca pueden ser un look de día con zapatillas y cesta o sofisticada de noche con manoletinas con brillo, clutch y maxicollar negro. También puedes optar por coser complementos o pegar parches para modificar aquellas prendas de las que te canses.
La comodidad, prioridad absoluta: Ten en cuenta que lo principal es utilizar tejidos naturales y ropa cómoda. Es muy importante que no apriete los senos o la cintura. Elige siempre la talla apropiada. Los vestidos son grandes aliados en comodidad y estilo. De hecho, puede atreverte a comprar algunos que no sean de la sección de premamá de una talla mayor a tu habitual. Y no dudes en presumir de barriga.
Aprovecha lo que puedas: Es muy importante que la ropa no te apriete en la cintura, por lo que si tus pantalones y faldas lo hacen hay que buscar una solución. Sin embargo, no es necesario guardarla en el armario a las primeras de cambio. Puedes utilizar una goma para dejar la cremallera bajada y permitir que esté ligeramente abierto. Quizás al pensarlo en frio no te parezca una gran idea pero cuando lo pruebes con tus vaqueros favoritos y una blusa por fuera verás que es verdaderamente efectivo.
Ojo con la ropa interior: No todo es el exterior. Durante el embarazo los pechos cambian y suelen aumentar de talla por lo que es muy importante comprar algunos. Esto es algo en lo que no hay que escatimar ya que lo primero es la salud. Si quieres aprovecharlos, puedes comenzar a utilizar los sujetadores de lactancia para que el tejido se adapte a tu cuerpo poco a poco y te resulten muy cómodos cuando te suba la leche, un momento en el que los pechos están especialmente sensibles.
Así que ya sabes, cuando empiece a notarse la barriguita, recuerda estos consejos y vestirte cada día será más sencillo.