Semana 24 de embarazo: viabilidad fetal

En la semana 24 (22 de desarrollo real) el bebé no para de moverse dentro de del útero. Da volteretas, estira y flexiona las extremidades, incluso bosteza. Es seguro que lo notas a diario, normalmente cuanto te relajas por la noche, sin embargo, lo cierto es que lo habitual es que el bebé duerma 20 de las 24 horas del día. Ya mide unos 30 centímetros y su peso está alrededor de los 600 gramos. Es normal que los niños pesen un poco más que las niñas.

En esta semana los pulmones empiezan a producir una sustancia que ayuda al intercambio de oxígeno en los pulmones. Se trata del surfactante pulmonar es clave en la viabilidad fetal. De hecho, en los casos en los que hay complicaciones y se adelanta el parto los profesionales médicos administran al bebé una medicación para acelerar la maduración de los pulmones y ayudarle a respirar y a adaptarse la vida fuera del útero.

Respecto a los sentidos, los órganos sensoriales del feto ya están maduros por lo que puede interactuar con los estímulos que llegan del exterior. Ahora sí, el bebé puede notar sabores y olores a través del líquido amniótico, aunque no puede ver ya que no hay luz en el interior del útero.

Respecto a la madre, esta semana se realiza una de las pruebas más conocidas, se trata del test de O’Sullivan, también llamado popularmente la prueba de la curva y que se realiza para detectar la diabetes gestacional.

Se realiza de forma rutinaria en este segundo trimestre, sin embargo, en algunos casos se hace también en el primero y en el tercer. Se trata de mujeres mayores de 35 años, con diabetes gestacional en el embarazo anterior, con antecedentes familiares, con obesidad al inicio del embarazo o con partos previos de niños de más de cuatro kilos. En el resto de las ocasiones se realiza en esta semana.

Consiste en un primer análisis de sangre en ayunas para ver la glucosa en sangre. Luego, la mujer toma un líquido dulce que contiene 50 gramos de glucosa y espera durante una hora sin moverse para que con una segunda extracción de sangre se comprueben de nuevo los niveles de glucosa en sangre y se pueda observar cómo trabaja el organismo de la mujer sin estímulos externos de movimiento.

La diabetes gestacional afecta en torno al 10 por ciento de los embarazos, lo que la convierte en la complicación gestacional más frecuente. Su diagnóstico es muy importante tanto para la madre como para el bebé ya que puede acarrear complicaciones como el aumento del líquido amniótico, el parto por cesárea, incremento considerable del peso del bebé, superando ampliamente los cuatro kilos, incluso muerte intrauterina.

También es importante controlarla para evitar problemas de salud en el niño a largo plazo ya que incrementa las posibilidades de que desarrolle obesidad, diabetes o hiperactividad.

En los casos en que los resultados son inconcluyentes o positivos, lo habitual es que la prueba inicial realizada en el ambulatorio se repita en el hospital de referencia para obtener un análisis más detallado y ofrecer a la mujer las recomendaciones adecuadas que, comienzan por incrementar la actividad física en los rangos adecuados para la gestante, controlar la ingesta de hidratos de carbono y realizar una dieta saludable, rica en verdura, si bien controlando las frutas con mucha azúcar. También es posible que sea necesario administrar medicación por lo que la mujer deberá seguir estrictamente las recomendaciones médicas.

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