Marpessa, 1987. /
El fotógrafo Ferdinando Scianna tiene un don para capturar el instante y convertirlo en algo ancestral, especialmente cuando se trata de representar los ritos y costumbres de su Sicilia natal. Henri Cartier-Bresson descubrió su talento y le pidió que se uniera a la agencia Magnum.
Ferdinando Scianna - Fotógrafo
La modelo Marpessa, por su parte, no es siciliana, sino una exótica mezcla de sangre holandesa y de Surinam, pero representó como nadie la belleza mediterránea en las campañas que el fotógrafo realizó para Dolce & Gabbana cuando la firma daba sus primeros pasos en el mundo de la moda. Ahora, la galería de arte Anne Clergue (en Arles, Francia) ha querido dedicar su gran exposición de verano a la poderosa química que se estableció en los años 80 entre la isla, el fotógrafo y la modelo.
Marpessa, Caltagirone, 1987 /
(Todas pueden verse en la exposición Sicily & Marpessa. Ferdinando Scianna.)
Sicily & Marpessa. Ferdinando Scianna (del 5 de julio al 27 de agosto) narra en imágenes la arriesgada apuesta de un fotógrafo que, en su primera incursión en el difícil mundo de la fotografía de moda, decidió dejar de lado los escenarios estilizados y ambientó los delicados diseños de Dolce & Gabbana en carnicerías, barberías, casas de comidas y patios de vecinos.
El resultado fue espectacular (tanto, que su huella sigue viva en las campañas de la firma) y el rostro exótico y la mirada llena de fuerza de Marpessa la convirtieron en un icono de moda que, aún hoy, nos deja sin aliento.