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Se terminó la fiesta de la ostentación en los bolsos. La generación millenial, jóvenes entre 20 y 35 años que dominan hoy el mundo de las tendencias y el consumo de moda, prefieren la discreción a gritar a los cuatro vientos sus marcas de cabecera. Los estampados saturados de monogramas, los detalles metálicos que reproducen los símbolos de las firmas o las iniciales de los diseñadores de turno no son bien recibidas por los nuevos trend setters, que no quieren saber de otra marca que no sea la suya personal. Se terminaron las mujeres-anuncio.
Un estudio de la consultora The NPD Group ha desvelado que un tercio de los bolsos vendidos en Estados Unidos de junio de 2015 a junio de 2016 no llevan ningún tipo de logo. La preferencia, en principio propia de los más jóvenes, se ha ido imponiendo al resto de las generaciones, arrastradas por el dominio de los gustos y preferencias juveniles en el consumo de moda. “Los consumidores se centran cada vez menos en la imagen y cada vez más en la individualidad”, explica en su informe Marshal Cohe, analista jefe de NPD. “Los tiempos en los que las compradoras buscaban formar parte del universo de una marca o un diseñador tocan a su fin. Ahora manda el deseo de encontrar un estilo funcional que sea único y encaje con el estilo de vida de cada persona”.
¿Qué marcas se han subido a este tren? Por ejemplo, Michael Kors, cuyos últimos modelos, el Gracie que llevan Gigi Hadid o Kendall Jenner o el 'tote' Mercer, aparecen ya con un logo mínimo. También Coach y Phoebe Philo (Cèline) practican esta estrategia. Sin embargo, la verdadera nueva estrella de este universo no-logo es Mansur Gavriel, cuyos bolsos exquisitamente sencillos y de materiales de calidad top se agotan en cuanto vuelven a reponerse en las webs y las tiendas. Un atractivo añadido de marcas como Mansur Gavriel y de muchas otras que empiezan a abrir mercado en este territorio sin logos (A.P.C., Anya Hindmarch, Kate Spade...) es el precio.
Se terminó ahorrar más de mill euros para hacerse con un diseño de una 'grand maison'. Por menos de la mitad, puedes hacerte con un bolso “silencioso” mucho más estiloso. “Nunca alguien elegante enseñará un logo”, ha dictaminado Jean Touitou, responsable de A.P.C. a The Wall Street Journal. En un artículo que anunciaba la muerte del bolso 'it'. Touitou afirmaba que ir con los logos por delante “es el símbolo de la vulgaridad”. Toca guardar los bolsos a tope de logos que hemos comprado todos estos años, pero sin lamentarse: en el próximo cambio de ciclo volverán a gustar.